Que lo llamen dictador y una solicitud de indagación por el delito de prevaricato. Ese es hasta el momento el precio que ha tenido que pagar el presidente de la Asamblea Legislativa, Henry Mora, por la aprobación del presupuesto ordinario 2015.
Ayer en conferencia de prensa Mora se refirió a la resolución de la Sala Constitucional que dio lugar a la consulta que presentaron diputados de oposición, señalando que se violó el principio democrático.
“Me parece riesgoso hablar de prevaricato. Me jugué el pellejo en las resoluciones”, indicó. Además justificó sus decisiones al afirmar que se amparó en la resolución de otro presidente de la Asamblea Legislativa en el 2010.
Sin embargo los legisladores lo acribillan por dar por aprobado el presupuesto en primer debate, cuando una mayoría lo votó en contra.
Tras las especulaciones de su interés en reelegirse como presidente del Congreso, DIARIO EXTRA consultó sobre el costo que ha pagado y el terreno que ha perdido, a lo que respondió: “Nunca puse en la balanza la reelección”.
Los diputados ahora analizan presentar un recurso de amparo.