Con miras a dar a conocer la belleza de la flora y fauna de la Zona Norte de nuestro país, las hermanas Ligia y Marta Sancho Morera se aliaron y crearon una pequeña empresa en Ciudad Quesada de San Carlos, Alajuela. El cartón es la materia prima que utilizan para desarrollar sorprendentes trabajos artesanales, los cuales aparte de innovar en las técnicas del arte, transmiten un mensaje de conservación.
“Es muy importante que la juventud valore la naturaleza que tenemos y decidimos crear artículos de uso cotidiano, pero a la vez artísticos. Promovemos el cuido del medio ambiente. También para que el extranjero que visita la región adquiera un recuerdo como por ejemplo de los animales, y se motiven a protegerlos en todo el mundo”, expresaron.
PRIMEROS PASOS
Doña Ligia recordó que hace ocho años los azares del destino la llevaron a conocer el moldeo de dicho material.
“Inicié como un hobby para ayudar a mis hijos con las tareas de la escuela, puede decirse que con cartón reciclado. Luego, al lograr diseños curiosos a la gente le gustó y los empecé a comercializar en ferias; poco a poco se fueron colocando, y hace cinco años abrimos Arte y reciclaje Artelis juntas. Cada día es una aventura buscar la manera de definir nuevos procedimientos”, comentó.
MATERIA PRIMA
Con sumo recelo como todo artesano, narró que emplean el cartón en donde vienen las manzanas o los huevos de cajas, o bien pliegos con distintos tipos de grosor. De igual forma aplican otros implementos como papel y resinas para lograr el efecto de texturas. Finalmente, colocan la mano de pintura, siempre de colores llamativos.
“Hacemos piezas pequeñas o magnetos con mariposas, ranas, hojas y animalitos costarricenses, y también diseños más grandes para hogares como utensilios decorativos, espejos, mesas, mariposas grandes, etcétera”, detalló.
El tiempo de duración es variable, ya que apenas le agarran el toque a una técnica lo aplican con gran facilidad.
AMOR Y EMPEÑO
Marta dijo que más que un negocio, formaron un familia. “Es realización, sobre todo porque es algo en gran parte familiar, los hijos nos ayudan en vacaciones, nuestros padres y las muchachas, somos uno. Asimismo, poder darle utilidad a materiales que no sabíamos que los podíamos utilizar, y se les ha dado lugar y la gente nos ha llenado mucho de elogios. Entonces uno se siente con una gran satisfacción de poder servir en algo que para uno también es muy bonito”, comentó.
PERIODISTA: Laura Morales Sánchez
CRÉDITOS: Fotos: Mauricio Arce, corresponsal
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Sábado 22 Marzo, 2014
HORA: 12:00 AM
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