Cada 15 de agosto, Día de la Madre, algunas privadas de libertad esperan la fecha no precisamente para celebrar en familia, sino para ver si les otorgan el indulto por parte del Presidente de la República, que llega hasta la cárcel El Buen Pastor, en San Rafael Arriba de Desamparados.
Fuentes relacionadas a otorgar la libertad los días viernes, insinuaron que podrían ser cuatro mujeres las que gocen de ese privilegio, quienes por diferentes circunstancias la perdieron y hoy están en prisión.
DIARIO EXTRA visitó el módulo llamado Casa Cuna, donde permanecen 32 reclusas junto a sus hijos menores de 3 años, las cuales descuentan condenas en su mayoría por infringir la ley de psicotrópicos y delitos contra la propiedad, que van en aumento.
A nuestra llegada, cerca del mediodía, pudimos observar algunos bebés en los brazos de sus jóvenes madres; mientras a otros los paseaban en coches por la pequeña sala donde se reúnen para ver televisión, a la espera de que el día termine.
Después del primer año de vida del infante, se incorpora al servicio de guardería en el Hogar Santamaría en Aserrí, esto con el fin de sacarlos del ambiente carcelario. Ahí reciben estimulación temprana y juegos para desarrollar habilidades, luego de los 3 años es entregado a un familiar que la madre autoriza.
MUJERES VULNERABLES
Kattia Carranza, trabajadora social, explicó que existen diferentes factores que llevan a estas mujeres, algunas madres solteras, a cometer delitos para subsistir.
“La responsabilidad recae sobre ellas, acoso laboral, madres jefas de hogar, violencia doméstica y escasas opciones de trabajo hacen que algunas de las privadas roben ropa para sus bebés.
La desprotección de las políticas estatales en función de las mujeres a nivel de intervención provoca una carencia importante, que las coloca en riesgo y vulnerabilidad y las involucran en los delitos”, explicó.
Carranza agregó que las zonas Atlántica, Sur y Norte son sectores donde se da el tráfico internacional de drogas y las mujeres son usadas como burras.
“Algunas de ellas han sido coaccionadas y obligadas a cometer o ser cómplices para transportar la droga en zonas limítrofes a cambio de dinero, que lo invierten en algunos casos en sus hijos”, alegó.
Este miércoles las privadas fueron homenajeadas con un almuerzo “especial” que degustaron con sus hijos, sin embargo aseguraron que el Día de la Madre es una jornada normal.
