EE.UU. (Agencias) - Asistir a un hospital de Alabama, Estados Unidos, para someterse a un procedimiento de circuncisión le cambió la vida por completo a un hombre identificado por la prensa local como Johnny Lee Banks Jr. Esto debido a que los especialistas le amputaron por completo el órgano y le dejaron unicamente un conducto para orinar.
Según los abogados del sujeto, este solicitó la operación de rutina en el centro médico Princeton Baptist de Birmingham con el detalle respectivo el mes pasado. Posteriormente le asignaron una fecha y asistió con normalidad. Sin embargo, por motivos que indagan las autoridades los urólogos le quitaron el pene.
“El señor Johnny Lee Banks Jr., de Birmingham y su esposa Zelda Banks procedieron con la demanda en contra del hospital, de los médicos y por ende de la administración por mala praxis. No tenía ningún tipo de malformación en el órgano reproductor para que pasara esto”, detallaron los defensores de la ley.
Las noticias mostraron que el afectado tardó varias horas en despertar por la anestesia y a como pudo se tocó y al consultarles a las enfermeras le dieron la noticia de lo que calificó como un crimen.
“El cliente expresa que la amputación le ha causado fuertes dolores y que su esposa también sufre”, agregaron.
Tras el incidente cientos de pacientes evitaron llegar a las instalaciones por temor a pasar por cirugías equivocadas y otros reclamaron en las calles mayor seguridad.
La vocera del centro y otras personas consultadas no le dieron la cara a la prensa para responder sobre las acusaciones que les lanzaron y la acción legal en curso.
Algunas televisoras se animaron a destacar que los médicos confundieron el expediente del afectado, con el de otro hombre que aspiraba a cambiarse de sexo. Un Tribunal será el encargado de pronunciarse al respecto.
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Viernes 25 Julio, 2014
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