Seis parejas de homosexuales comenzaron los trámites legales para hacer que su relación sea reconocida y comience a generar derechos civiles y patrimoniales, amparándose en la nueva Ley de la Persona Joven.
Los primero en llegar a interponer el incidente en el juzgado de familia de San José fueron los jóvenes Alberto González y Lorenzo Serrano, quienes tienen más de seis años de convivencia. Posteriormente, dos parejas más en Heredia, uno en Guadalupe, otro en Cañas y el último en Desamparados. En la mayoría de estos casos uno o ambos de los accionantes son menores de 35 años.
“Estamos nerviosas pero sabemos que esto es lo correcto. Queremos dejar de ser ciudadanos de segunda categoría y el reconocimiento de nuestros derechos patrimoniales es una forma para lograrlo”, comentó Fiorella Bruno, quien conforma una de las parejas que hicieron los trámites legales.
Marcos Castillo, abogado de estas familias gays, comentó que el proceso no sería sencillo, ya que por lo general este tipo de reconocimientos dura aproximadamente un año en resolverse. No obstante, está confiado en que a pesar de las críticas recibidas la ley se encuentra de su lado, especialmente con el portillo que se les abrió al salir publicada la Ley de la Persona Joven.
Contra viento y marea, la comunidad gay quiere que se le reconozcan sus derechos patrimoniales o sea que tengan la oportunidad de poder heredarle a su conviviente (sin importar si es de su mismo sexo), así como poder solicitar préstamos en conjunto, estar con su compañero o compañera cuando este se encuentre internado en un hospital, otro de los puntos.
Hay quienes quieren ir un paso más adelante y que se les reconozca sus relación como si fueran legalmente una unión de hecho, entre los derechos que obtendrían sería sobre los bienes gananciales o sea aquellos que se obtienen en conjunto durante la convivencia y que en este momento solo se adquieren cuando se reconoce que existe una unión de hecho.
Quienes critican la interpretación que se le está dando a esta normativa aseguran que estos son derechos que pueden obtenerse modificando leyes y reglamentos, pero sin que con ello se modifique el concepto de matrimonio que tiene la sociedad costarricense y que es un tema muy sensible.
“Siempre hemos sido una familia”
Su relación comenzó hace 10 años y desde entonces, con apoyo de sus familiares y amigos más cercanos han logrado conformar una familia tradicional, solo que en lugar de estar constituida por una pareja de hombre y mujer, ellas son dos mujeres que decidieron unir sus vidas y criar juntas a su hijo Luca. Sobre este tema nos hablaron Fiorella Bruno y su compañera Ana Cristina Bindi.
► ¿Qué vienen a pedirles a los Tribunales?
Nosotras estamos pidiendo un derecho y con ello estamos haciendo historia.
► ¿Creen que el Tribunal les dará la razón?
Queremos ser muy cautelosas porque sabemos que no será fácil. Hasta que nos aprueben este nosotras no podemos celebrar.
► Nos comentó su abogado que el proceso durará por lo menos un año. ¿Están dispuestas a esperarlo?
Ya hemos esperado muchos años y un año más no va a ser gran cosa.
► ¿Qué dice su hijo de todo esto?
Nuestro hijo tiene 7 años y ha esperado mucho esto, a pesar de ello se enojó mucho cuando le dijimos que íbamos a venir hoy aquí para formalizar la relación, porque me dijo “Mami, siempre hemos sido una familia” y eso es algo cierto, porque seguiremos siendo una familia sin importar lo que se decida aquí.
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CRÉDITOS: Fotos: Mariano Ramírez y Wilbert Hernández
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Jueves 11 Julio, 2013
HORA: 12:00 AM
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