Uno de los principales componentes de un automóvil para la seguridad son los neumáticos o llantas porque constituyen el único contacto con la superficie de ruedo.
Por esa razón es importante que estos tengan un buen grip o agarre para que además de maniobrar correctamente permitan frenar, sumado a que las condiciones del terreno o climáticas que provocan una mayor exigencia.
El desarrollo y evolución de los neumáticos es tan importante que cada año los fabricantes invierten millones de dólares en investigación para desarrollar aquellos que brinden mejores elementos de seguridad para los distintos tipos de caminos.
TIPOS DE LLANTAS
De acuerdo con los expertos, existen diferentes clasificaciones de los neumáticos.
La primera de las clasificaciones sería por el material del que está hecho el aro o rin. Este puede ser de aluminio, acero, magnesio o una aleación de aluminio, níquel y magnesio.
Otra forma de clasificar las llantas es por la forma o dibujo de la banda de rodadura. Estas pueden ser asimétricas, que se caracterizan por tener sucos diferentes a cada lado y son muy comunes en los autos deportivos por su buena adherencia.
Los de rodadura direccional tienen los mismos dibujos a cada lado de la llanta, aunque presentan el problema de que tienden a desgastarse más rápido. Son muy buenas para el frenado, principalmente en terreno húmedo.
Por su parte, la rodadura en bloques permite mayor estabilidad y maniobrabilidad en carreteras mojadas.
Finalmente están la rodadura repetitiva, que es común en camiones y autobuses, y la rodadura en costillas.
Otra clasificación importante es por el tipo de carcasa o de neumático.
Este se puede clasificar en neumático en diagonal (serie de capas de tejido alternas y cruzadas colocadas de forma diagonal), neumático en radial (las capas se colocan de manera radial a través de un talón que recorre toda la llanta) y finalmente el neumático sólido, que no cuenta con aire, sino que usa un aislante que le da estabilidad a la rueda.
Una clasificación adicional es por el tipo de clima en que se rueda. Por ello hay neumáticos para nieve, para verano y para todo tipo de temporada.
CONSEJOS PARA ELEGIR LAS MEJORES
Los expertos recomiendan respetar todas las dimensiones del fabricante. Los vehículos establecen cuáles llantas pueden utilizar y cuáles no.
Colocarle unas llantas diferentes puede provocar un desgaste más rápido o accidentes de tránsito.
Para esto la llanta tiene a un costado las especificaciones. Por eso es importante aprender a leerlas. Estas tienen una serie de números y letras que establecen cada elemento.
Por ejemplo, una llanta 255/55 R20 110V significa que tiene una anchura de 255 milímetros, el 55 establece que la altura de la llanta es de un 55% del perfil.
R20 establece si el tipo de llanta, que puede ser radial o convencional, mientras que el 20 es el tamaño del rin, en este caso pulgadas.
Finalmente, el 110V se refiere a la capacidad máxima de carga que puede aguantar la llanta.
El segundo consejo es elegir la llanta según el uso y las condiciones en que rodarán. Por eso antes de comprarlas el dueño debe preguntarse en qué condiciones climáticas manejará, cuál es el estilo de conducción y si el auto es eléctrico o de combustible.
También se debe prestar atención a los caminos que normalmente recorre. En uno de lastre es preferible una llanta más resistente y con mejor tracción, mientras que si conduce en la ciudad, lo mejor será una que equilibre la tracción con la resistencia.
Otra recomendación importante es comprar las llantas en centros especializados, esto servirá para tener todo el apoyo de un agente especializado que lo asesore.
¿CUÁNDO TENGO QUE CAMBIARLAS?
Lo primero que se debe saber es que como otras partes del auto las llantas también requieren un mantenimiento de rutina. Justamente los expertos pueden indicarle el momento en que cambiarlas es urgente.
En la mayoría de los casos se debe cambiarlas cuando les queden alrededor de 2/32″ de profundidad de la banda de rodadura, que es la distancia entre la base de la ranura y la parte superior de dicha banda.
Otro factor importante para revisar es cuando existen grietas en las llantas. Esto significa que las condiciones extremas han provocado una mayor erosión de la superficie.
También es importante buscar algún abultamiento porque, aunque el resto de la superficie esté bien, un abultamiento significa que la llanta está perdiendo su vida útil.
Finalmente se puede buscar el TWI (Tread Wear Indicator o Indicador de Desgaste). Este se encuentra a un costado de la llanta. Si el desgaste ha llegado hasta allí, ya cumplió su vida útil.
¿QUÉ HACER CON LAS VIEJAS?
Después de cambiar las llantas viene un problema: ¿qué hacer con ellas? Algunos fabricantes las recuperan, pero otros no.
Si en su caso no sabe qué hacer con ellas, por favor, no haga lo siguiente.
En primer lugar: no las acumule en su casa. Las llantas viejas pueden ser un foco de reproducción de mosquitos como el Aedes aegypti, que propaga el dengue. Usted, su familia y sus vecinos estarán en riesgo si lo hace.
Lo segundo que no debe hacer es tirarlas a la basura o a lotes baldíos. Hacer esto podría afectar a otras personas, pero también termina contaminando el medio ambiente.
Lo mejor es buscar centros de acopio, donde les darán una disposición correcta. Un ejemplo es Fundellantas, que gracias a acuerdos con algunas organizaciones recoge las llantas usadas para darles una correcta disposición.
PERIODISTA: Emmanuel Miranda Pérez
EMAIL: [email protected]
Lunes 08 de Abril, 2024
HORA: 12:00 AM
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