Cobro del marchamo es injusto
Opinión
En Costa Rica el marchamo se entiende como un pago obligatorio de un seguro para vehículos que se realiza una vez al año al Instituto Nacional de Seguros. Es un requisito indispensable para que todo conductor pueda transitar. También conocido como derecho de circulación.
Actualmente se discute en la Asamblea Legislativa una disminución en el pago de dicho marchamo, situación que es bien vista por todos los costarricenses, sin embargo, el tema tiene tintes políticos que tienen la intención de perjudicar los ingresos del actual Gobierno.
Si todos los grupos políticos ahí representados votaran de forma unánime a favor de una disminución del impuesto de circulación, podríamos interpretar el resultado como un acuerdo de las fracciones por el bienestar general.
Pero no es así, lamentablemente es un impuesto injusto que nos obligan a pagar todos los años con carreteras en muy mal estado. Este pago sin lugar a dudas encarece el precio del automóvil, que a todas luces se deprecia cada año y que algunos políticos tradicionales nos condenaron a efectuarlo, por favores políticos.
Es claro que los impuestos permiten que el Estado pueda ofrecer a los ciudadanos determinados bienes y servicios que están dirigidos a incrementar su bienestar social.
En este sentido, son utilizados para pagar las nóminas de aquellas personas que trabajan en el sector público. Junto a esto, gracias a ellos, se construyen infraestructuras que permiten el desarrollo de la sociedad.
Los impuestos permiten crear un sistema educativo público que forme a todos los niños y jóvenes de un país para que posteriormente puedan incorporarse al mercado laboral y generar riqueza.
Ahora bien, imaginemos un país sin carreteras, infraestructuras ferroviarias o puertos que permiten el transporte de mercancía.
Esta situación bloquearía por completo la economía y haría más difícil la vida de los ciudadanos.
Lo que supone que el pago de impuestos permite crear una estructura pública para actuar sobre los fallos de mercado, incrementando la eficiencia. Entonces, pese a que el cobro del marchamo es exagerado y desproporcionado cuando lo comparamos con el resto de Centroamérica, en relación al cobro y el estado de las carreteras, no se justifica semejante poco de dinero que nos quitan.
Normalmente, los gobiernos buscan que los impuestos sean aplicados de la manera más justa posible.
Para lograrlo, se aplican dos principios fundamentales: la equidad horizontal y la equidad vertical.
El primero sostiene que los contribuyentes que tienen las mismas características deberían ser tratados de igual forma. El segundo principio indica que las personas que se encuentran en circunstancias distintas deben ser tratadas de forma distinta siguiendo algún criterio de justicia.
Finalmente, tanto Panamá como El Salvador, Honduras y Nicaragua cobran el derecho de circulación vehicular con un precio fijo o escalonado, a diferencia de Costa Rica y Guatemala donde se cobra un impuesto al valor de estos según el año.
*Director Ejecutivo Asociación Salvemos El Río Pacuare
