La deuda con Guanacaste es hoy
Editorial
Cada año, como ya es tradición, se celebra el 25 de julio La Anexión del Partido de Nicoya a Costa Rica y con ello vienen festejos e inauguración de obras en Guanacaste. Pero ¿qué pasa el resto del año?
Para nadie es un secreto que una buena parte de la provincia guanacasteca subsiste a base de la agricultura, un sector que a la fecha se encuentra de capa caída, pues los productores no solo se enfrentan a los cambios de clima, ya sea con un exceso de lluvias o una sequía extrema, sino que no cuentan con acceso a un seguro para cosechas, canales de riego ni fuentes de financiamiento.
El Índice Mensual de Actividad Económica del Banco Central (IMAE) afirma que, a diferencia de otras áreas, esta es una que aún no logra recuperarse de la caída financiera.
Una especial situación es la que viven los arroceros, cuya mayor siembra se encuentra justamente en Guanacaste. Estos no tendrán nada que festejar, tras anularse la fijación de precios al consumidor.
Para este año no se verían protestas, habrá que esperar si lo que el Gobierno prometió a estos grupos finalmente se convierte en realidad. El ministro de Agricultura Víctor Carvajal hizo un trabajo de hormiga la última semana para evitar que se viera el descontento.
El proyecto Paacume, mejor conocido como agua para Guanacaste, tardará todavía un tiempo para ser efectivo, y las necesidades son ya, teniendo a las puertas el fenómeno de El Niño.
La sequía sin duda representa una amenaza no solo para el sector productivo, sino para el ganadero.
Cabe destacar que, si bien diversos estudios hablan de una disminución de la pobreza en la provincia durante los últimos cinco años, lo cierto es que estos datos deben verse con cuidado.
No falta quien aduzca que la provincia atraviesa por dos realidades. Mientras algunas zonas brillan con lujosos centros turísticos, en otras comunidades apenas y reúnen las condiciones mínimas para subsistir.
Para nadie es un secreto que las áreas rurales y costeras se mantienen entre los índices más bajos de desarrollo humano en el país, con todo lo que esto significa.
No muy lejos de Nicoya se encuentra La Cruz, una de las zonas del país donde se vive con mayor dificultad, debido a la falta de fuentes de empleo y el aumento en la desigualdad.
Aunque los números han bajado, lo cierto es que todavía no se alcanza tener el desempeño que había antes de la pandemia, dado el golpe que habían sufridos sectores como el turismo, servicios y restaurantes.
Y de todo esto no es responsable solo un Gobierno, sino que se trata de una deuda que se venía arrastrando desde varias décadas, y que en definitiva se acrecentó con la pandemia.
¿Qué pasa con los diputados que representan y han representando a la provincia? ¿Qué han hecho por sus comunidades? Podríamos enumerar una serie de proyectos que no han visto la luz del día.
Entonces no se trata de celebrar un día del año y el resto olvidarnos de que existen nuestros hermanos guanacastecos.
Esta población requiere acciones para mejorar su situación y eso es ya, que sientan que valió realmente la pena esa anexión.
