Un estudiante del Colegio Técnico Profesional de Pacayas, en Cartago, está envuelto en un escándalo que a todas luces es ilegal porque junto con su mamá denunció ante el Ministerio Público y el Ministerio de Educación abusos del director, el subdirector y dos policías de Fuerza Pública durante una requisa.
Al parecer al colegial lo obligaron a desnudarse por un indicio que tenían que almacenaba droga entre sus pertenencias, lo que al final se demostró era falso.
Según la denuncia con expediente No.14-001290-0345-PE, de la cual DIARIO EXTRA tiene copia, el menor relató que durante una clase de agricultura llegaron dos policías de apellidos Aguilar y Ulloa a realizar un inspección antidrogas.
Según el denunciante, el 7 de marzo del 2014 en las instalaciones educativas los perros lo olfatearon y a pesar de no dar positivo, lo obligaron a salir del salón para una revisión más minuciosa.
Esa mañana recibió el llamado de la orientadora para que la acompañara a la dirección, el joven accedió, aparentemente lo esperaban el subdirector y un policía porque al parecer estaba vendiendo droga.
“...los policías me llevaron en compañía del subdirector, él cerró las cortinas y en ese momento el oficial le dijo que se fuera quitando la ropa...”, se lee en la denuncia.
Presuntamente el joven apenado les preguntó a los policías para qué debía desnudarse y le respondieron que eso es normal, que ocupaban saber si andaba algún tipo de droga.
Pese a que el menor vio extraño lo que estaba pasando hizo caso a las autoridades y siguió la instrucciones.
“ … yo les obedecí y me quité el uniforme del colegio, así como el bóxer, pues ellos me obligaron a quitármelo, quedando completamente desnudo...”, agrega el documento.
Incluso la madre del colegial, quien autorizó que se publicara la denuncia, declaró a El Periódico de más Venta en Costa Rica que su hijo le comentó que el director le dijo: “Si es necesario le metemos el dedo por el ano”, situación que evidentemente molestó a la denunciante.
LLEGARÁ HASTA LAS ÚLTIMAS CONSECUENCIAS
La madre del menor, de apellido Méndez, comentó a DIARIO EXTRA: “El 7 de marzo del 2014 estaba mi hijo en clase, lo llevan a la dirección, pregunta qué estaba pasando. Al parecer era que estaba consumiendo drogas dentro del colegio. Fue donde le piden que se desvistiera, lo dejan completamente desnudo, después me llaman y me dicen que habían denunciado a mi hijo por consumo de drogas”.
Según la mujer, le indicaron que sin falta el lunes después de esos hechos debía llevar una prueba de doping porque si no su hijo no entraría al colegio. “Le llevé la prueba y dio negativo”, aseguró Méndez.
El 24 de marzo al parecer los mismos policías que aparentemente desvistieron al colegial volvieron a pasar con los perros y lo requisaron, le dijeron que aceptara que cuando ellos llegaban ya había repartido la droga.
“En tres ocasiones lo requisaron, le decían que la ropa que usaba era de alto precio para un muchacho como él y yo les dije que era ropa americana”, añadió la mujer.
Según Méndez, su hijo tuvo muchos cambios en su estado de ánimo después de los supuestos abusos que sufrió, de hecho una profesora guía y la orientadora lo encontraron llorando cuando se vestía y le consultaron por lo que estaba pasando.
“Ellas le dijeron que estuviera tranquilo porque era algo normal”, dijo la denunciante, lo que la enfureció todavía más por el abuso que ella alega sufrió su hijo.
COLEGIO Y MSP ATENTOS
DIARIO EXTRA intentó conversar con los denunciados, pero en la delegación de la Fuerza Pública de Pacayas nos dijeron que no se encontraban, les dejamos el mensaje con el oficial Manuel Serrano Acuña pero no obtuvimos respuesta.
Sin embargo el Ministerio de Seguridad Pública nos informó que como es un proceso judicial para no entorpecerlo, no se referirían al tema.
“En relación con su consulta, existe un proceso judicial abierto por ese supuesto hecho y son las autoridades judiciales quienes deben determinar la veracidad o no de lo que ahí se establece”, dijo Carlos Hidalgo, jefe de la Oficina de Relaciones Públicas y Prensa del Ministerio de Seguridad Pública (MSP), vía correo electrónico.
En la Contraloría de los Derechos Estudiantiles del Ministerio de Educación Pública nos indicaron que van a seguir con lo que el reglamento indica y harán la investigación del caso.
“Con relación a este caso la madre de familia vino el lunes y lo que indica la mamá es que se dio una situación de estas, por ende por parte de la Contraloría de los Derechos Estudiantiles nos vamos a acoger al protocolo correspondiente.
Si esto llego a pasar es muy delicado porque para eso hay un protocolo de cómo abordar estas situaciones, más si estás involucrando a un menor de edad”, expresó Marilyn Jiménez, directora de la Contraloría de los Derechos Estudiantiles.
AMENAZAS DESPUÉS DE LA DENUNCIA
Pero el calvario para este joven no acabó con el presunto abuso, pues alegan que después de denunciar lo que sucedió han sufrido una serie de amenazas y situaciones intimidantes.
“El director nos cita y nos dice que son tres denuncias, que él con eso puede llamar al PANI para que metan a mi hijo a un reformatorio, que yo soy una negligente, que me van a quitar los hijos y le van a manchar el expediente académico al menor, que no va a permitir que acepten a mi hijo en ninguna otra institución del país”, denunció Méndez.
“Hasta amenazó con rebajarle 19 puntos de la nota de conducta porque lo encontraron besando a una estudiante en la boca yo no accedí a firmar la boleta porque era una acusación tonta”, indicó.
“¡Ya no más! Cómo es posible que por cosas tan insignificantes le vayan a rebajar 19 puntos en la nota de conducta. A mí me parece una completa persecución contra mi hijo. Mi hijo tiene problemas de aprendizaje. A otros padres los manipularán, a mí no me pueden manipular”, agregó.
La señora asegura que después de eso se desató una persecución contra su muchacho, pues hasta le han repetido en varias ocasiones la prueba de doping y otras para ver si ha tenido relaciones coitales.
“Que todo el mundo sepa que mi hijo está limpio, que todos lo que ellos han dicho no es verdad. Mi hijo no duerme, él piensa que en cualquier momento nos van a separar como familia. No había orden de ningún juez que avalara que desnudaran a mi hijo”, finalizó.
