Como ya es toda una costumbre en Zarcero se llevó a cabo el tradicional rezo del Niño Dios; llegaron personas de distintas partes del país, ya que es un evento que nadie quiere perderse.
Los habitantes se mostraron muy alegres y ansiosos por la realización del rezo, entre estos se encuentra Evangelista Blanco, quien desde hace 37 años se ha encargado de elaborar el característico pesebre de la festividad.
“En estos rezos siempre estamos con buena musiquita, rompope, galletas y bizcochos para todos los que vienen a rezar el rosario del Niño”, dijo.
Además, Blanco rescató la importancia que tiene mantener el festejo tan típico de Zarcero, el cual une a personas de distintos pueblos.
“Desde 1981 realizamos este rezo en el parque y es una tradición muy bonita que todos tenemos que conservar, además, es una forma de darle gracias a Dios por todas las bendiciones que nos da”, comentó Evangelista.
Este año los cantos del rezo estuvieron dirigidos por un grupo de Sarchí que se lució con una excelente interpretación.