Camarillo. (AFP) – Un intenso incendio forestal que se propaga velozmente obligó este jueves a la evacuación de miles de personas en apenas 24 horas en el sur de California, donde cientos de bomberos batallan contra las llamas.
Varias personas resultaron heridas y fueron trasladadas a hospitales por el fuego bautizado como “Mountain”, que amenaza unas 3.500 casas y ya devoró casi 8.000 hectáreas.
Las llamas, que se iniciaron la mañana del miércoles en el condado de Ventura, al norte de Los Ángeles, ya arrasaron varios vecindarios y destruyeron decenas de casas, pero las autoridades aún no contabilizan el estrago inicial.
Dawn Deleon narró los estresantes minutos que tuvo para huir de su casa con sus seis perros.
“Vimos las casas de los vecinos ardiendo en llamas y pensé que era hora de salir de ahí. Nos fuimos, pero volví cinco minutos después para buscar mi teléfono y la casa ya estaba en llamas, destruida”, relató.
Más de 14.000 residentes recibieron órdenes o advertencias de evacuación principalmente en las localidades de Camarillo, Somis y Moorpark, informó el sheriff de Ventura, Jim Fryhoff.
“Sabemos que es un momento doloroso. El incendio es sumamente peligroso”, dijo el oficial, al tiempo que insistió en la necesidad de obedecer las órdenes de evacuación en la región, en donde viven unas 30.000 personas.
“Este incendio está muy activo e impredecible. Tenemos muchos recursos en acción y queremos tener garantías de que todos están seguros al tiempo que se desplazan en busca de refugio”, agregó.
“No he podido dormir, estaba tratando de encontrar un lugar seguro”, dijo a medios locales Erica Preciado, residente de la zona, quien en la madrugada abandonó su casa junto a su esposo por temor al posible paso de las llamas.
“Agarré algunas fotos, documentos y algunas cosas y me fui muy temprano”, indicó entre lágrimas.
Otro residente explicó a la televisora KTLA que abandonó su hogar de 27 años junto a su familia para luego enterarse de que fue destruido por el fuego.
“No quedó nada”, dijo con la voz entrecortada.