En cuestión de 10 horas el volcán Turrialba expulsó ceniza en 31 oportunidades, todas fueron visibles para la población según datos de la Red Sismológica Nacional (RSN), cuyos expertos se encontraban en el coloso realizando inspecciones.
Producto de ello, las autoridades pidieron en las últimas horas el desalojo de las comunidades de La Central y Las Virtudes.
Ambos sectores se encuentran dentro de un radio de 5 kilómetros del coloso turrialbeño, mismo espacio que fue cubierto por la ceniza expulsada durante los dos eventos de este domingo. La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) señaló que por prevención ante el nuevo ciclo eruptivo del cráter, las zonas mencionadas permanecerán cerradas y con protección por parte de los miembros de guardaparques del Sinac (Sistema Nacional de Áreas de Conservación).
De acuerdo con informes de la institución, la decisión se tomó teniendo en consideración la gran cantidad de turistas y curiosos que se presentan a diario a conocer el volcán.
El primero de los eventos ocurrió a las 6:43 a.m. de este domingo, mientras que el segundo se presentó minutos después de las 3 p.m., en este último acontecimiento la cortina de ceniza alcanzó una altura cercana a los 2 kilómetros. Cabe destacar que estas dos erupciones han sido de las más importantes en los últimos meses, considerando que a inicios del 2015 el coloso permaneció cerrado durante tres meses debido a la seguidilla de expulsiones de ceniza del cráter principal, así como el rompimiento de una de las paredes.
Los expertos, tanto de la Red Sismológica Nacional como del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), habían previsto constantes actividades en ese coloso, calificándolas como regulares dentro del proceso de estabilización.
Según datos de ambas entidades, el viento ha hecho correr la ceniza hacia el sur de esa zona donde se ubica el volcán.
Al cierre de edición, la comunidad de Los Guarumos también fue controlada para efectos de acceso.