Entre jueza que ordenó allanamientos y exagente del OIJ, denuncian abogados
Las conclusiones en el caso conocido como Pancho Villa continúan durante esta semana. El principal alegato de los defensores de los imputados es que las pruebas obtenidas por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y presentadas por el Ministerio Público fueron recabadas de manera ilegal.
Jeans Porras, defensor del hombre de apellidos Méndez Mora, aseguró que la Fiscalía “básicamente ha tratado con puras suposiciones e hipótesis policiales sostener este caso. Inclusive en la legitimación ha tenido que pedir sobreseimiento, incluso se han amparado a la pericia que nosotros mismos contratamos para demostrar el carácter lícito de todos los bienes”, detalló.
Sobre la supuesta ilegalidad de la prueba, en apariencia la jueza que giró la orden de allanamiento para la casa y oficina del exagente del OIJ, de apellidos Campos Jiménez, habría tenido una relación con él.
“La defensa ha sostenido que una de las licenciadas de apellido Murillo, quien trabaja en Grecia, conoció este caso de forma extraordinaria, siendo inclusive pareja sentimental de uno de los imputados en el pasado. Se hizo creer que una persona de Grecia estaba dentro del caso para arraigar la investigación en ese lugar”, agregó.
Durante el juicio, el licenciado Celso Gamboa, defensor de Darwin González, conocido como Pancho Villa, indicó que ha existido una manipulación en las evidencias, como en las intervenciones telefónicas, con el fin de que las acciones parezcan ilícitas.
“Este caso inicia diciendo que Darwin produce aceite vegetal y lo traslada hasta Nicaragua en camiones cisterna, al final se logra acreditar que no es productor de aceite”, dijo Gamboa.
CAMBIO DE NÚMERO
En las investigaciones judiciales destaca que González cambió varias veces su número telefónico, no obstante, su defensor argumentó que eso ocurrió porque era acosado por la madre biológica del hijo que él y su esposa adoptaron.
“Mi cliente era acosado por una mujer de nombre Angélica, la cual es indigente. Él y su esposa, como familia, deciden mejorarle la vida a un niño. Incluso en las intervenciones se puede ver cómo la mujer llama a Darwin a las 10 de la noche para pedirle comida y preguntar por su hijo”, resaltó el abogado.
Con respecto a las llamadas presentadas al Tribunal en contra del sujeto de apellido Méndez, que también es defendido por Gamboa, se alegó que están cortadas. “Se ha enseñado lo que se quiere. En una de las llamadas se escucha cuando este hombre dice que se va a desviar porque hay un operativo, hasta ahí es lo que se le da al Tribunal, no obstante, en esa misma conversación él explica que es debido a que anda a su hija y no anda silla”, finalizó.
La Fiscalía solicitó 307 años de prisión para los sospechosos del caso por los delitos de favorecimiento, legitimación de capitales, tráfico de drogas y asociación ilícita.
SOBRE EL CASO
Debemos recordar que los hechos se remontan a 2018 cuando los agentes del OIJ iniciaron una indagación contra un grupo que en apariencia se dedicaba a ingresar drogas por la Zona Sur y posteriormente la transportaban al Pacífico Central, donde la vendían a terceros para que estos la comercializaran. Se cree que con el dinero que conseguían adquirían inmuebles. Los allanamientos por este caso se realizaron en 2021, principalmente en la zona de Corredores, donde incluso la agrupación utilizaba a dos agentes judiciales para que realizaran trabajos de contrainteligencia y así transportar los estupefacientes.