Álvaro Arroyo, de 73 años, fue el sobreviviente a un accidente acuático en Lepanto, donde perdió la vida su cuñado, José Pablo Salas, de 79 años.
Ambos viajaban desde San Ramón de Alajuela hacia playa Coyote, pero en el camino, fueron sorprendidos por una cabeza de agua en la quebrada La Balsa, en Vainilla de Lepanto, Puntarenas.
Arroyo contó a Grupo Extra cómo fue que logró sobrevivir, una vez que la cabeza de agua los arrastró y el vehículo en el que viajaban se apagó.
“Al momento, le pedí ayuda al 9-1-1 porque era demasiada la corriente que tenía el río, gracias a Dios me pude comunicar con ellos, y ellos se comunicaron con los Bomberos, la policía y la Cruz Roja, y llegaron, pero en el momento no podían hacer nada por lo crecido que estaba el río”, explicó.
En un momento dado, él logró salir, pero ahí fue cuando dejó de ver a su cuñado. Luego, el río lo arrastró 100 metros abajo, y llegó a la orilla.
Álvaro recordó que a pesar de que activaron la doble tracción de su vehículo todoterreno, la corriente era muy fuerte.
Además, perdió sus lentes en medio de la noche, y así se complicó el escenario. Sin embargo, se aferró a la vida y continuó luchando por salir.
Entre lágrimas, contó que en un momento de duda llamó a su hijo y se despidió de él, ya que las posibilidades de salir con vida eran casi nulas.
“Es un lugar solitario, ahí no hay luz para nada, fue demasiado duro, mil veces le doy gracias a Dios de haberme permitido… llegó un momento cuando yo pedí ayuda que llamé al hijo mío y me despedí de él, fue muy duro porque sabíamos que nos íbamos a morir ahí, no había salvación”, contó.
El cuerpo de su cuñado fue encontrado a 3 kilómetros aproximadamente del lugar, según confirmó la Cruz Roja Costarricense.
Según testigos, la víctima era vecino de San Ramón, y era un odontólogo jubilado.
*Con información del periodista Alberto Cuadra, Extranoticias.