La familia de Karla Solano Bonilla, desaparecida desde el 23 de noviembre, sigue exigiendo respuestas y justicia tras la desaparición de la joven en Limón.
Este viernes, realizaron una marcha pacífica que dio inicio a las 8:30 a.m., en Cieneguita de Limón con rumbo a los Tribunales de Justicia de la zona.
Las personas que participaron de la marcha fueron respaldadas por miembros de la comunidad y la Fuerza Pública, quienes ayudaron a coordinar el paso por las calles.
“Gracias a Dios una señora de la Contraloría, ya cuando ya nos íbamos habló con mi mamá, y dijo que ellos nos iban a ayudar, que iban a investigar a ver qué fue lo que pasó, y le explicó que así como nosotros estamos indignados, ellos también. Porque ese juez lo soltó… Fiscalía dictó seis meses de preventiva, el señor apeló y ahí se fue a audiencia y el juez le dio la libertad”, expresó Surely Solano, hermana de la joven.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuvo al sospechoso, un hombre de 56 años, el pasado 12 de diciembre, tras 4 allanamientos en Cieneguita.
Según las autoridades, Karla habría abordado un vehículo en el sector de Santa Rosa de Limón antes de perderse su rastro.
Sin embargo, un juez le otorgó la libertad, generando malestar en la familia y la comunidad.
El día de la desaparición
El sábado 23 de noviembre Karla Solano avisó que iba a ir a la pulpería a comprarse algo para comer.
Sin embargo, tras esa salida, no volvió a casa.
“Pasadas las 6:50 p.m., ella solo pidió permiso para ir a la pulpería, ya que ella padecía de ansiedad por la enfermedad que ella tenía, que tomaba medicamentos, que era sobre la tiroides. Ella nos dijo que ella iba a ir a la pulpería a comprarse chucherías”, indicó la hermana de la joven.
Días después, el OIJ detuvo al hombre de 56 años, a quien la familia de la joven conocen de toda la vida.
“Desde que yo tengo conciencia, conozco a esta persona, nunca esperamos que el enemigo estuviera tan cerca, uno nunca termina de conocer a las personas”, confesó Surely.