Rusia, (SEP).- Andréi Gúrov, usuario del portal molotok.ru, vende almas de famosos en forma de bustos y pequeñas esculturas por una importante suma de dinero y sin pedir autorización a la “víctima”.
El comerciante exige a sus clientes que le envíen una foto y una breve biografía de la persona cuya alma desean comprar y establece como única condición que esa persona esté viva.
En 33 días, Gúrov se compromete a tener lista una réplica exacta del alma solicitada. Según el contrato, el cliente recibirá una escultura hecha a mano y con un material natural.
El ruso explica que cuando transforma el espíritu de la persona en un objeto físico, sigue al pie de la letra la información que le proveerá su imaginación, que él mismo califica de “muy viva”, gracias al contacto que tiene con las fuerzas supremas.
El contrato de compraventa no sólo establece el precio, la fecha exacta de creación de la obra y el nombre de la celebridad cuya alma será copiada, sino que también autoriza al cliente a hacer lo que quiera con el espíritu.