Es mejor que cuide su aguinaldo: un análisis elaborado por el Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas de la Universidad de Costa Rica (UCR) desde ya anticipa un incremento en los precios al consumidor para diciembre y enero.
Esto sería producto del incremento en la demanda, el alza en el tipo de cambio y en el precio de las gasolinas, así como el encarecimiento en el valor de las importaciones.
Al desagregar el comportamiento de los precios por artículos, para el primer semestre de 2021, se puede apreciar que la gasolina es la que genera el mayor impacto en el Índice Precios al Consumidor (IPC), con una tasa de crecimiento interanual de 1,24 %. Ningún otro producto muestra un crecimiento interanual para ese mismo período superior al 0,26 %.
La reducción que se experimentó en el segundo y tercer trimestre de 2020 se habría asociado principalmente a la caída del consumo privado. Sin embargo, los investigadores advierten que, después de julio del 2020, se ha presentado una tendencia, aunque intercalada, al alza.
A setiembre de 2021, el crecimiento interanual de los precios ha alcanzado el 2,09 %, con crecimientos mensuales de 0,21 % a julio, 0,28 % a agosto y de 0,63 % para setiembre.
En el lado contrario, se observa que el tomate, la cebolla y la electricidad fueron los elementos de mayor aporte a la baja en los productos considerados por el IPC. Estos son los que reflejan una menor tasa de crecimiento.
Lo anterior respondería un efecto estacional, es decir algo propio de la época, que podría variar en cualquier momento. En cuanto a las tarifas eléctricas, la reducción obedece a que la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos (Aresep) excluyó ciertas partidas que no tenían trazabilidad con el servicio de costos para el Instituto Costarricense de Electricidad.
El Banco Central señaló recientemente que tiene bajo monitoreo constante los precios y reconoció que algunos de los factores externos que están presionando la inflación al alza podrían extenderse por un mayor tiempo, aunque siguen siendo efectos temporales.
No obstante, las proyecciones del Banco Central apuntan a que la inflación se mantendrá por debajo del 3 %, al menos hasta el próximo año.