La huelga nacional que inundó las calles del país hizo que más de una persona saliera afectada. Mientras que los estudiantes disfrutaron de un día libre, muchos usuarios de los hospitales salieron por dentro y al llegar a sus citas médicas encontraron puertas cerradas y funcionarios en las calles.
Los docentes de escuelas y colegios se unieron a las manifestaciones con una asistencia masiva, tomando en cuenta la situación los padres de familia prefirieron no mandar a sus hijos a los centros educativos.
En los hospitales se calcula que entre 600 y 800 funcionarios se unieron a las marchas de todo el país. En el Hospital México los empleados de cirugía, nutrición y aseo fueron los que se unieron en mayor medida a los movimientos, mientras que en el San Juan de Dios el servicio de farmacia fue el que se vio más afectado. El Hospital Calderón Guardia y el Blanco Cervantes no mostraron problemas en la atención por la situación. Fuera de la capital, los asegurados que asistieron al hospital de Heredia encontraron que al menos el 95% de los servicios se suspendieron y en Pérez Zeledón el nosocomio estaba cerrado en su totalidad.
SE TRASLADARON “A PATA”
En Alajuela los que más sufrieron fueron los turistas, debido a que tuvieron que pegarse una buena “troleada” a causa de los bloqueos, por lo cual al bajarse del avión muchos no pudieron agarrar taxi como regularmente lo harían, sino que debieron caminar varios kilómetros para librarse de las presas que inundaron los alrededores del Aeropuerto Juan Santamaría.
A nivel de seguridad, la Fuerza Pública detuvo a cuatro personas en Limón, por aprovecharse de la huelga para asaltar a las personas, cobrar “peaje” y obstruir la vía pública, tres eran menores de edad, según informaron las autoridades.