El limón es un ingrediente que, además de aportar un delicioso sabor a los alimentos, cuenta con propiedades astringentes, desinfectantes y funciona como un blanqueador natural.
Del mismo modo, se caracteriza por sus altos contenidos de vitamina C, antioxidantes, y compuestos que regulan la acidez y favorecen la eliminación de grasa.
Una opción sencilla y natural para combatir las ojeras, basta con exprimir el zumo de un limón en un recipiente pequeño y agregar dos rodajas de pepino, se dejan reposar en el líquido durante un tiempo y luego se ponen los pepinos los ojos, ayudará a reducir la hinchazón.
Si sufre de piel grasa, los limones son el producto perfecto, para limpiar los poros y restaurar el balance de la piel, por medio de un tratamiento de vapor: se utiliza medio limón en un recipiente con agua hirviendo y coloca una toalla sobre la cabeza, dejando que el vapor limpie el rostro.
Otro uso es para fortalecer las uñas, al remojar en una mezcla medio limón, un poco de jabón líquido y un poco de agua tibia. Otra alternativa es frotar limón en rodajas sobre tus uñas a diario.
Se puede implementar como exfoliante de labios, antes de dormir, se aplica jugo de limón sobre ellos y se lava muy bien al día siguiente. El limón favorece la hidratación y elimina las células muertas.