Los Centros Cívicos por la Paz son espacios donde niños y jóvenes menores de 18 años expuestos a riesgos sociales tienen un lugar seguro para su formación integral a través de la educación, tecnología, arte, deporte y recreación.
Actualmente existen 7 de estos centros en el país, y recién se anunció la apertura de 8 más en cantones como Roble de Puntarenas, Corredores, Limón, Liberia, Pérez Zeledón, Goicoechea, Alajuela y Pavas.
Estos espacios son construidos por el Gobierno con financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en conjunto con gobiernos locales y participación de otras instituciones del Estado.
Además de la música, arte, deporte y otros, se les da talleres sobre violencia intrafamiliar, violencia de género, embarazo en adolescentes, violencia en centros educativos, así como violencia asociada al microtráfico de sustancias prohibidas.
“Un niño o joven más en un Centro Cívico es un adulto menos en una cárcel. Trabajemos en los menores con riesgo para cambiar su mentalidad. Trabajemos en prevención de la violencia y erradiquemos cualquiera de sus manifestaciones, con atención primaria que genere oportunidades de inclusión y siga transformando vidas”, comentó el ministro de Justicia y Paz, Gerald Campos.
Cada año se benefician un aproximado de 12.000 niños, niñas y adolescentes.