Albania. (AFP) – Europa habilitará un corredor aéreo humanitario con la Franja de Gaza, anunció este lunes la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al afirmar que los palestinos no pueden \”pagar el precio de la barbarie de Hamás\”.
“Los palestinos en Gaza necesitan ayuda humanitaria\”, es por eso \”lanzamos un corredor humanitario a través de Egipto”, declaró.
“Los dos primeros vuelos partirán esta semana y llevarán material humanitario a Gaza”, agregó Von der Leyen desde Tirana, en Albania, donde la Unión Europea (UE) celebró una cumbre junto a los Balcanes occidentales.
Saldrán vuelos hacia Egipto \”para llevar suministros vitales a las organizaciones humanitarias en el terreno en Gaza.
Los dos primeros vuelos tendrán lugar esta semana y llevarán cargamento humanitario de Unicef, medicamentos y kits de higiene\”, precisa un comunicado difundido por la noche, en el que no se daban detalles sobre las modalidades del suministro a Gaza, territorio sometido a un bloqueo total desde el 7 de octubre.
Unas horas antes la Organización Mundial de la Salud advirtió que Gaza, asediada desde el sangriento ataque del movimiento islamista palestino Hamás contra Israel, se enfrentaría a una \”verdadera catástrofe\” en 24 horas si no llegaba ayuda inmediata.
Desde el 7 de octubre, 1 millón de palestinos desesperados se desplazaron hacia el sur de la Franja de Gaza, pequeño enclave controlado por Hamás y completamente aislado del mundo desde hace 10 días.
\”No puede haber ninguna justificación para el acto terrorista de Hamás\”, declaró Von der Leyen, \”para la brutal masacre de 1.400 personas en Israel. Ante este horror, Israel tiene derecho a defenderse de acuerdo con el derecho humanitario e internacional\”.
\”Y en este mismo momento los palestinos de Gaza necesitan ayuda humanitaria. No pueden pagar el precio de la barbarie de Hamás\”, añadió.
La ofensiva de Hamás en Israel dejó más de 1.400 muertes, la mayoría civiles, según el ejército.
Los bombardeos lanzados en represalia contra Gaza dejaron al menos 2.750 muertos, la mayoría civiles, entre ellos cientos de niños, según las autoridades locales.