Mudarse requiere de cierta logística, es necesario estimar dinero, tiempo, permisos, agendar servicios y más.
Si buscas realizar una mudanza sencilla, práctica y organizada, puedes empezar desechando lo que no utilizas para evitar empacar lo que ya no usas.
– Se recomendamos preparar la mudanza con anterioridad y evitar empacar a último minuto, destina algunas horas para ir guardando todo poco a poco, utiliza tu música preferida y tómate tu tiempo, haz tu mejor esfuerzo por disfrutar ese proceso.
-Mira la mudanza como una limpieza del hogar, es una oportunidad para sacar de casa lo que ya no está alineado con tu propósito de vida.
Aprovecha para regalar, donar, botar. Lleva al nuevo espacio lo que realmente quieres que esté contigo.
– Escoge el transporte adecuado para tu mudanza, para evitar imprevistos es muy importante que selecciones el vehículo que mejor se ajuste al tamaño de tu hogar o cantidad de elementos.
– Toma fotos para recordar, por ejemplo, los cables. Si quieres recordar la forma correcta de conectarlos, tómales una foto, de esta forma cuando tengas que volver a armonizar un espacio o a instalar algo, sabrás cómo hacerlo.
-Etiqueta tus cajas con nombre y color, marcando las cajas o bolsas con el nombre de la habitación de destino, hará que los encargados de la mudanza descarguen cada elemento en su lugar.
– Utiliza bolsas para empacar tu mudanza, aunque las bolsas dificultan un poco el inventario, las de basura pueden ser útiles para objetos blandos, como por ejemplo las colchas, cobijas y peluches.
-Usa las maletas de viaje, son perfectas para guardar objetos pesados. por ejemplo, los libros que tengas en casa.
– Empaca individualmente los objetos delicados individualmente para que no haya roce entre ellos, así evitas que se puedan romper. Por ejemplo, es muy común poner los platos dentro de una caja, pero debes individualizarlos.
– Ahorra espacio al empacar la ropa, un gran truco es enrollar las prendas, en lugar de doblarlas.
-Empaca una caja “Ábreme primero” Incluye artículos de aseo como el cepillado de dientes, papel higiénico, sábanas, tus gafas, artículos de tocador y medicamentos, de esta forma luego del cansancio por la mudanza podrás tener a mano lo necesario para la primer noche en tu nuevo hogar.