Una cría luchó por su vida durante varias horas a la par de una ballena jorobada que se encontraba muerta en Isla Cabuya, Montezuma de Puntarenas.
Este lunes un video en el que se observa un ballenato tratando de alimentarse de su madre, la cual estaba encallada entre unas piedras a la orilla de la playa, se hizo viral.
Según Ángel Herrera, director de la Escuela de Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional (UNA), la ballena parió a la cría y falleció posiblemente por algún problema de salud.
“La corriente la llevó a la costa porque cuando dan a luz las ballenas nacen cerca de la costa y, al estar cerca, la corriente llevó el cuerpo hacia la zona rocosa”, explicó.
Lo más triste de todo es que el bebé cetáceo también murió después de unas horas por no poder comer, pues al parecer tenía al menos dos días de nacido.
“Lo que se ve es que está empujando a la mamá para alimentarse. Al no poder conseguir tomar la leche muere de hambre”, indicó el experto.
De acuerdo con Herrera, debido al tamaño de la ballena, que puede pesar hasta 20 toneladas, es muy difícil hacer una necropsia (autopsia para animales) para determinar las causas de la muerte.
“Es difícil decir porqué murió, porque es un organismo que pesa varias toneladas, que está en una zona de difícil acceso y, además de eso, está sobre unas rocas. Es casi imposible de mover”, detalló.
Conforme con el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) en lo que va del año se han presentado 13 de estos casos.
A partir de junio, el Pacífico costarricense se convierte en el hábitat de miles de ballenas jorobadas que migran del hemisferio sur hacia aguas tropicales y cálidas para la crianza y reproducción de sus crías.
Luego se quedan en Costa Rica alrededor de cinco meses para posteriormente volver a migrar al hemisferio sur. En todo este tiempo, transitan por territorio nacional alrededor de 11.000 ejemplares.