El 7 de enero de 2015 durante la noche, un pleito entre dos mujeres terminó de forma trágica cuando un familiar de una de ellas, en aparente venganza habría accionado un arma de fuego en reiteradas ocasiones dentro de la vivienda de la otra implicada, impactando en la cabeza de un menor de edad que se encontraba sentado en un sofá de la sala viendo televisión y quién en segundos falleció en el lugar.
Una vez cometido el sangriento crimen, el hombre identificado con los apellidos Fletes Guido huyó en un vehículo que, en apariencia, era conducido por una mujer de apellidos Paniagua Arroyo, en el que también se encontraba otra persona apellidada Marín.
LOS HECHOS
Las autoridades informaron que el hecho se registró en la comunidad de La Guaira de Puerto Viejo en Sarapiquí donde, por razones desconocidas, dos mujeres iniciaron una fuerte discusión que terminó en golpes.
En apariencia, esta situación provocó la ira de Fletes, quién es primo de una de las mujeres, es entonces cuando toma un arma y se dirige a la otra propiedad amenazando a quienes se encontraban en el lugar mientras disparaba en distintas direcciones, provocando la trágica muerte del menor.
Las tres personas a bordo del vehículo fueron detenidas momentos después en un bar ubicado en La Virgen de Sarapiquí, una propiedad que pertenece a la familia del acusado.
Desde entonces, nueve años más tarde da inicio al primer debate de este caso.
Maritza Cruz Montoya, abogada del imputado Marín, señaló que este retraso procesal ha sido perjudicial para ambas partes.
\”Me estoy apersonando al proceso, no soy la persona que inició el caso, sin embargo, he notado que dentro del expediente que está en el Tribunal desde hace ya bastantes años el debate se ha suspendido en reiteradas ocasiones no por causas atribuibles al Tribunal, sino porque dentro del proceso se encuentran otros abogados particulares, que de acuerdo a la agenda han presentado cambios de señalamiento y otros aspectos que ha hecho que el caso se haya extendido cada vez más\”, indicó.
Además, explicó que, motivado por la pandemia, el Tribunal también tuvo que suspender el proceso debido a que no se contaba con el espacio físico adecuado para realizarlo.
“Es evidente que no hubo justicia tanto para las víctimas como para los imputados, es lamentable que no se cumplan con esos principios que establece la normativa procesal y constitucional, incluso de derechos internacionales”, concluyó Cruz.
El debate continuará en los próximos días en los que se espera la presentación de todos los cargos a los imputados en el caso de Fletes por homicidio y portación de arma de fuego mientras que por los otros dos, Paniagua y Marín, por el delito de favorecimiento ilícito.