Los ticos podrían estar pagando la electricidad hasta un 50% más cara, al menos esto es lo que estima la administración entrante, porque para nadie es un secreto que hay una promesa de reducir la tarifa a los consumidores.
Rodrigo Chaves, presidente electo, manifestó que esto sería posible únicamente ordenando las finanzas del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).
El tema se polemizó desde antes de ser candidato presidencial, ya que su tesis siempre ha sido que la entidad no aplica correctamente las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF).
Otros factores que según el presidente 49 deben revisarse son las compras de electricidad de la institución, la generación privada, la contabilidad y los reportes de pérdidas cambiarias.
Asimismo, el ICE tendría una gran cantidad de activos sin uso, cuyo mantenimiento también generaría un impacto en sus finanzas.
Si bien es cierto el Instituto insiste en que viene aplicando las NIIF desde 2020, Chaves opina lo contrario. De igual modo se conoció en el Consejo de Gobierno que la implementación produjo una afectación material en la rentabilidad institucional del -4%.
Estas normas son instrumentos que permiten estandarizar los costos de las empresas del Estado, su uso está alineado a las mejores prácticas internacionales y las recomendaciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). En Costa Rica el proceso de adopción de estas normas empezó hace 11 años.
Es necesario señalar que la obligación de cumplir las NIIF por el ICE se establece en el transitorio único de la Ley No.9573, del 18 de junio de 2018, en donde la Asamblea Legislativa concedió un plazo máximo de 1 año para cumplir al 100% la aplicación de esta normativa. Este plazo venció en julio de 2019.
ASUNTO DE PLANIFICACIÓN
Por su parte, la Cámara de Industrias denunció que los costarricenses tendremos que pagar electricidad más cara porque el ICE usa diésel para generar electricidad cuando debió usar búnker, que es más barato.
“Los consumidores de electricidad recibimos aumentos, no solo por generar con búnker, sino porque por las fallas en planeación se tendrá que pagar $0,446 por kilovatio-hora producido con diésel, en vez de $0,212 si se produjera con búnker.
Esto es usar un combustible 110% más caro innecesariamente, pues la planta de generación está diseñada para usar búnker”, manifestó Enrique Egloff, presidente de la Cámara de Industrias de Costa Rica.
Para los industriales no es de recibo que mientras unos hacen esfuerzos para mejorar la competitividad, por otro lado se tomen decisiones que calificaron de inconsistentes y en el caso del sector productivo impactan en la competitividad, que al final es la capacidad de generar empleo.
“En los últimos años se ha dejado de comprar energía renovable a plantas de generación privada a las cuales se les venció el contrato con el ICE, por solo el hecho de provenir de plantas privadas, y ahora se tiene que producir con combustibles, que no solo están en un pico histórico de precio, sino que como se acabó el búnker, entonces se produce con diésel, que es doblemente más caro por kilovatio-hora”, añadió.
*Colaboró el periodista Aarón Chinchilla Carvajal.