Nuevamente, los ticos volvieron a enloquecer por una moneda conmemorativa del Banco Central de Costa Rica (BCCR). En esta ocasión, en honor a la Abolición del Ejército.
FICHAS AGOTADAS
El ente emisor decidió vender la moneda en varias entidades para evitar las largas filas en los Museos del BCCR, sin embargo, esto no se pudo impedir pese a esta nueva metodología.
En esta oportunidad, el banco optó por colocar fichas con anticipación para que los interesados la adquirieran en este lugar, ubicado en los sótanos de la Plaza de la Cultura, atendiendo a 250 personas por día.
No obstante, todas las fichas se agotaron como pan caliente y las filas, durante el primer día, fueron de gran tamaño, donde los amantes de la numismática esperaron de 7 a 9 horas.
“Recibimos gente desde ayer en la noche (domingo para el lector) haciendo fila, hoy empezamos a distribuir las fichas para poderle asegurar a las personas sus dos monedas durante varios días. Por la capacidad que tenemos se repartieron, prácticamente, todas”, contó Dayana González, vocera de Museos del BCCR, a DIARIO EXTRA.
ADULTO MAYOR EN FILA 1
Debido al furor por comprar la moneda, la organización asignó un espacio exclusivo para los ciudadanos de oro con el objetivo de que no estén largas horas esperando por su coleccionable.
“Los adultos mayores siempre llegan mucho, están muy interesados en este tipo de objetos. Se les dio un espacio preferencial, pero son bastantes, hay que reconocerlo”, agregó González.
En años anteriores cuando el banco ha sacado monedas como la del Bicentenario, las filas rompieron récords con vueltas hasta la misma cuadra, lo cual en esta ocasión se quiso evitar, al menos, en un porcentaje.
“En las experiencias anteriores lo hemos visto, sí, ha sido muy ansiado por la gente obtener este tipo de monedas, ya sean porque las coleccionan o se las quieren dar a alguien en el extranjero. Esta moneda conmemora un hecho histórico más, su diseño es particular y viene en un estuche certificado”, manifestó.
En un sondeo realizado por DIARIO EXTRA, los costarricenses comentaron que faltó un poco de orden a la hora de recibir a las personas que ingresaban para adquirir la moneda.
La entidad tiene 3.000 monedas para vender mientras otras entidades como el bancos, cooperativas y mutuales, cuentan con 50 o hasta 700 ejemplares a la venta.