La Defensoría de Apoyo al Deudor (Defade) cuestiona una iniciativa que pretende reducir los tiempos en la atención de procesos en cobro judicial, pues teme que los notarios se conviertan en juez y parte.
Así lo externó Stephanie Portuguez, asesora legal de la organización, quien dijo que entiende la intención del proyecto, pero no la comparte por las implicaciones que podría tener.
Se trata del expediente 21.826 denominado “Ley de Procedimientos no contenciosos en sede notarial”. “El proyecto está diseñado para que el acreedor sea de manera unánime quien contrate los servicios del notario, por lo que desde el inicio se podría cuestionar su imparcialidad y a esto se le suma que un juez de la República imparcial conocería del proceso hasta la puesta en posesión y solo para ver si se cumplieron con los requisitos”, explicó.
En ese sentido, una persona podría enterarse que fue sujeta a un proceso hipotecario aun si no le realizan la notificación como corresponde, situación que a su criterio es muy lamentable.
Según datos del Estado de la Justicia, los casos en cobro judicial suman 854.412, pensiones alimentarias 191.542, penal 156.710, civil 51.018, violencia doméstica 42.725.
“Me parece que el proyecto tiene una buena intención, que es el hecho de descongestionar los juzgados que están completamente saturados, sin embargo, en materia de cobro judicial y cuando estamos hablando de bienes tan importantes como lo son las propiedades, la estabilidad de la familia, como lo viene a ser una casa, me parece un tema muy delicado”, señaló.
Adujo que es común haya una gran cantidad de procesos, incluso ganados con nulidad de notificación, porque algunos notarios, según la abogada, se prestan para hacer notificaciones falsas.
“Si se prestan para esto, no quisiéramos pensar que algunos de los notarios se vayan a prestar para otras cosas, sin que se lleve a cabo el debido proceso de sus bienes”, manifestó.
Es importante anotar que en la actualidad la mora judicial conlleva un peso para la obtención de justicia que tiene consecuencias sociales, humanas, económicas y por supuesto jurídicas.
“Si el objetivo es brindar mayor agilidad y celeridad a diversos procesos no contenciosos, que, si bien siempre deben ser remitidos a la vía jurisdiccional, hay que revisar los procedimientos que podrían realizar los notarios, por supuesto es mucho más importante ver cómo acortar los tiempos considerablemente y el contribuir a la disminución de los asuntos que ingresan, diariamente, a los juzgados civiles y de familia”, finalizó Portuguez.