Jeyland Mitchell vivió una noche de contrastes en la Liga de Campeones de Europa. El defensa costarricense jugó como titular en la derrota del Feyenoord 0-2 en casa contra el Inter de Milán en la ida de los octavos de final, un resultado que deja a los italianos a un paso de cuartos.
El seleccionado nacional apareció como lateral derecho en la línea de cuatro del técnico Robin van Persie y sitió el rigor de medirse a varios de los mejores atacantes del planeta.
El choque en el estadio de Kuip fue muy cerrado, con dos equipos bien plantados defensivamente, hasta que un despiste de los locales permitió la apertura del marcador. Al minuto 38, Nicolò Barella colgó un balón al área desde la derecha del ataque ‘nerazzurri’ y el servicio fue rematado ante el arquero local por Marcus Thuram, que metió la pierna a modo de patada de karateca para empujarla a la red. El francés remató de manera acrobática, pero prácticamente sin marca, lo que dejó en evidencia a Mitchell, que era quién debía anularlo.
El Inter aprovechó el tanto para ganar tranquilidad y gestionó bien el juego, especialmente desde el segundo gol, con un disparo seco de Lautaro Martínez tras una asistencia de Piotr Zieliński.
El tico volvió a ser protagonista al provocar un penal al 64’, luego de un forcejeo en el área en el que terminó cometiendo falta sobre Thuram. El árbitro Espen Eskås dejó correr la jugada, pero el VAR dio la alerta y tras la revisión se marcó la pena máxima. Zieliński tomó la responsabilidad del lanzamiento, pero su remate fue adivinado por el arquero Timon Wellenreuther
El duelo de vuelta del martes de la próxima semana en el estadio Giuseppe Meazza de la capital lombarda se presenta de entrada cómodo para los italianos.
