Un hombre de apellidos Ríos Garro, el principal sospechoso de matar a su pareja Fernanda Sánchez y su hija Raisha, tiene un perfil altamente violento y conflictivo, de acuerdo con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Así lo describió Randy Ramírez, exjefe del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en Tarrazú, durante su participación en el juicio donde se le acusa de ser el responsable del doble homicidio, ocurrido en 2020 en San Pablo de León Cortés.
Relató que contra el sospechoso se abrió en 2010 un expediente criminal por acusaciones de abusos sexuales en contra de una persona menor de edad, caso que fue descartado ante dudas por los testimonios durante el debate.
Además el agente judicial indicó que cuando llegó a la comunidad de San Pablo, varios vecinos se acercaron a denunciar a Ríos por robo de ganado, pero al iniciar la investigación los casos se detuvieron.
El sujeto se desempeñaba inicialmente como peón, sin embargo, después se dedicó a trabajos de soldadura y construcción como contratista.
Por otra parte, Ríos tenía 15 años de convivir con Fernanda, pero previamente mantuvo un vínculo de matrimonio con una sobrina y otras mujeres, con las que tuvo varios hijos.
Antes de los homicidios, el sospechoso tenía interés en formalizar una relación con una adolescente de 15 años, a la cual quería llevarse a su casa, según el OIJ.
Además una amiga cercana a Fernanda, identificada como Liliana, les dijo a los agentes judiciales que la ahora fallecida sufría de violencia doméstica y que Ríos le era infiel.
Xavier y Luz Miriam Sánchez, hermanos de Fernanda, también declararon durante el debate que Ríos fue una persona altamente agresiva con Fernanda y que la tenía controlada, que incluso quería hacerla pasar por loca.