Revela OIJ en juicio por doble homicidio
Después de aparentemente asesinar a su pareja y su hija, el sospechoso de estas muertes, un hombre de apellidos Ríos Garro, alertó a las autoridades del lugar donde estarían los cuerpos.
Se trata de los homicidios de Fernanda y Raisha, pareja e hija de Ríos, respectivamente, ocurridos en julio de 2020 en San Pablo de León Cortés, en los que el hombre figura como el principal sospechoso.
Tras atender la alerta de incendio de la casa donde Ríos vivía con ambas, los bomberos llegaron al lugar para apagar las llamas y descartaron la presencia de personas dentro de la estructura.
Sin embargo, el encartado habría dicho a policías y rescatistas en la escena que debían buscar por un tajo ubicado a 300 metros de la vivienda, según Randy Ramírez, exjefe del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en Tarrazú.
En el tercer día del juicio Ramírez dijo que Ríos quiso hacer creer a las autoridades presentes que Fernanda estaba loca y que seguramente habría matado a su hija para después quitarse la vida.
“Les dijo a los policías que por qué no iban a busca a esa (…), que seguramente se jaló una torta, le mató a su hija y se pudo haber quitado la vida”, comentó.
Dos oficiales de la Fuerza Pública se dirigieron al tajo, que contenía restos de materiales de construcción, huesos de animales y basura, y divisaron los cadáveres. La intención del sospechoso era culpar a Fernanda, ya que tenía problemas de convivencia con esta, y varios familiares denunciaron violencia doméstica por parte de Ríos.
En apariencia, según la tesis de la Fiscalía, el encartado planeó la quema de la vivienda para borrar la evidencia de sangre de los asesinatos de Fernanda y Raisha, y luego lanzó los cuerpos al tajo.