Managua. (EFE) – El Movimiento 19 de Abril Masaya denunció que un grupo de policías y paramilitares ejecutó al menos tres nuevos secuestros en Nicaragua, entre ellos el de una mujer que amamantaba a su hija cuando fue sacada de su casa.
\”Gloria Pérez acaba de ser secuestrada por la policía orteguista y sus paramilitares, mientras alimentaba a su hija vía lactancia\”, denunció el Movimiento, en sus redes sociales.
El rapto de la mujer y de dos hombres se dio en el marco de la crisis sociopolítica que ha dejado entre 317 y 448 muertos desde abril, según organismos humanitarios, en protestas contra el presidente Daniel Ortega.
Pérez y un hombre identificado como Eddy Antonio Blanco fueron secuestrados en la ciudad de Masaya, una de las que más han sufrido ataques armados de las \”fuerzas combinadas\” del Gobierno, compuestas por policías, antimotines, parapolicías, paramilitares y grupos oficialistas, que se desplazan en camionetas Toyota Hilux, encapuchados y con armas de guerra.
Según el Movimiento, los policías y paramilitares ingresaron por la fuerza a las viviendas de Pérez y Blanco, sin orden judicial, y los sustrajeron con violencia, por lo que insistió en que no se trató de arrestos formales, sino de \”secuestros\”.
Una situación similar vivió el joven Luis Ramón Quintero, en la ciudad de Noquinohomo, a unos 42 kilómetros al sureste de Managua, según los denunciantes.
El Movimiento 19 de Abril Masaya divulgó fotografías de la casa de Pérez cuando era cercada por los policías y civiles encapuchados y en una de las cuales se le ve a ella saliendo con su bebé en brazos.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha advertido que Nicaragua vive una \”tercera fase\” de la represión gubernamental, \”más ruda, más explícita y burocrática\”, que es la \”criminalización de manifestantes\”.
VICEPRESIDENTA PIDE JUSTICIA
La vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, exigió que \”los golpistas paguen\” por sus \”crímenes\”, luego de que el Gobierno local oficializara por primera vez, en 197, el número de muertos en protestas contra el presidente Daniel Ortega.
\”Ellos los mataron, que paguen por sus crímenes. Ellos, los golpistas, asesinaron a estos hermanos nicaragüenses. Que paguen por sus crímenes\”, dijo Murillo, a través de medios del Gobierno.
El canciller nicaragüense, Denis Moncada, y la Policía Nacional, reconocieron esta mañana que al menos 197 personas han muerto en las protestas que iniciaron el 18 de abril, una cifra inferior a las 266 de la oficialista Comisión de la Verdad.
Las cifras oficiales también son menores a las de fuentes independientes, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que ha reportado 317, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), con 305, y la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (Anpdh), con 448.
Nicaragua atraviesa la crisis sociopolítica más sangrienta desde la década de 1980, también con Ortega como presidente. La también primera dama alegó que las muertes se dieron durante un intento de golpe de Estado contra su esposo, y aseguró saber quiénes lo ejecutaron, aunque no identificó a los autores.