Dos hombres de apellidos Alvarado y Rodríguez que en apariencia serían sicarios de la organización de Arias Monge, alias Diablo fueron condenados a 50 y 28 años de prisión respectivamente.
Esto por los delitos de homicidio calificado y tentativa de homicidio.
Asimismo, padre e hija de apellido Tenorio fueron condenados a 25 años de prisión por figurar como coautores de un homicidio.
De acuerdo a las investigaciones los hechos se remontan a 2015 en Ticabán de Limón, donde en apariencia padre e hijo contrataron un grupo de personas para asesinar a varios hombres por rencillas personales, no obstante se logró el cometido de 2 homicidios
