Desde la Oficina del Consumidor Financiero (OCF) aseguran que, si un banco realiza rebajas sin consentimiento, debe devolverlas el mismo día y no esperarse más tiempo.
“Sobre lo que está ocurriendo, tiene la obligación inmediata de esos fondos, esto de conformidad del artículo 24 del reglamento de sistemas de arreglos de pago. El consumidor no debe asumir estos créditos duplicados, la entidad financiera debe responder de manera inmediata y no hacer esperar al consumidor días”, explicó Ernesto Solano, abogado de la Oficina.
“El consumidor anteriormente tenía que esperar 5, 10, 15 días o un mes, la normativa es muy clara, no se le puede causar ese daño al consumidor y, por ende, se le debe aplicar inmediatamente en sus cuentas”, agregó.
Un banco reconoció recientemente que presentó problemas con las tarjetas anunciando que horas después reintegrarían los montos a los afectados con las duplicaciones.
En estos casos, los clientes no deben realizar ninguna gestión. La reversión debe ser aplicada por los bancos. En aquella oportunidad, no se dio una justificación del por qué se hicieron rebajos dobles.
Los usuarios entraron en pánico al pensar que el dinero podía haberse perdido, algo que claramente no ocurrió.
Parte del problema es que está entidad financiera ha tenido problema con sus sistemas en las últimas semanas. En redes sociales, sus clientes manifiestan que la plataforma a veces no sirve y que no hay nadie que de una respuesta ante su situación.
En su momento, estos plantearon dudas como: ¿Por qué motivo tienen que hacer un doble rebajo sin autorización del dueño de la cuenta?, ¿Dónde están las políticas de seguridad que brindan a sus clientes? ¿Dónde está la innovación, controles de seguridad? ¿y la tranquilidad que nos merecemos como clientes?
El rebajo se hizo solo a un grupo de clientes y no a todos en general, pero aún así causó preocupación. Estos rebajos dobles se hacen cuando el usuario pasa la tarjeta en algún comercio y luego ve reflejado el monto de la compra dos veces.
La situación a veces tiene a confundir acerca de si el problema viene del banco, del datáfono, o el comercio, como ocurrió en este caso.