Aunque todos lo conocemos como marchamo, en realidad lo que nos pesa todos los años, al menos a los propietarios de automotores, es realmente el Impuesto a la Propiedad de Vehículos.
Este representa alrededor de un 60% del costo total del derecho de circulación y hasta ahora es poco lo que se ha podido explicar sobre porqué algunas veces hay que pagar más, cuando el valor de un carro se deprecia todos los años.
Sería justo que los carros de ¢3 millones o menos paguen hasta un 66% menos, porque, seamos realistas, esto al final se ha convertido en un impuesto al aguinaldo.
Tener que sacar entre ¢79 mil y ¢94 mil del aguinaldo para pagar el marchamo cada año pega en el bolsillo. Además, este ahorro contribuiría a elevar el consumo en los hogares.
Si bien los detractores dicen que esto tendría un efecto sobre las finanzas del Ministerio de Hacienda, lo cierto es que cada mes nos dicen que la recaudación tributaria subió, y que cada día estamos mejor.
De una forma muy oportuna, aparece el ministro Nogui Acosta diciéndonos que, aun cuando los ingresos del Gobierno son los más altos de los últimos años, si este proyecto se aprueba vamos a impactar el presupuesto del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) para el arreglo de carreteras.
Y pues precisamente esa es la pregunta del millón cada año: ¿Qué hacen con la plata del marchamo? Sería interesante ver cuánto de este dinero pasa directamente a la mejora de carreteras.
Para nadie es un secreto que hay otros países, incluso cercanos, en donde el estado vial es mucho mejor que el de Costa Rica, aun y cuando no tienen un impuesto específico para ello.
Los ticos deberíamos de empezar a pedir cuentas de cada cinco que se va en impuestos, más aún cuando se trata de las calles, porque al final si pagamos más, pero vemos la inversión, habría una justificación. Pero ¿y si no?
Hoy en día tenemos una de las cargas fiscales más altas, pese a que finalmente no sabemos en qué se va el dinero, porque no tenemos calles, seguridad ni una educación de primer mundo.
Sería una decisión muy impopular oponerse a la rebaja del marchamo justo cuando están por realizarse las elecciones municipales. Eso implica que es probable que Hacienda tenga que hacer nuevos cálculos para el presupuesto 2024.
Más interesante aún sería saber qué piensa la señora de Purral de la intención de los diputados de rebajar el impuesto, porque finalmente don Nogui representa al Gobierno.
Si es justicia tributaria que los propietarios de carros de mayor valor paguen más, eso es otra historia. La realidad es que la depreciación comprende un principio contable y rara vez se cumple en este caso.
Acosta dijo que: “No es a través de las exoneraciones que vamos a mejorar. El impuesto al ruedo se basa en la idea de tener carreteras nuevas, entonces si exoneráramos el pago de ese impuesto no vamos a tener las carreteras que la gente necesita”.
Pues le preguntamos a don Nogui: ¿Hoy en día las tenemos? Porque el impuesto a la propiedad tiene más de 30 años de existir… Esperamos su respuesta.