La Selección Nacional de Fútbol para Amputados conoció a sus rivales del mundial que disputará en Guadalajara, México. La gran cita se llevará a cabo del 24 de octubre al 5 de noviembre y contará con la participación de 24 países.
La Tricolor se ubicó en el grupo C, abrirá ante Polonia, que es una de las principales potencias de esta disciplina. El segundo encuentro será frente a Japón y cerrarán la primera fase contra Colombia, una de las más fuertes del continente. A la segunda ronda avanzan los dos mejores.
“Es complicado, son potencias. La vez pasada, en la Copa América, enfrentamos a Colombia, ellos manejan muy bien la táctica fija, tienen una jugada muy calcada que nos hizo muchísimo daño.
Polonia tiene una preparación increíble, reciben mucho apoyo de la Federación de Fútbol de ese país, y Japón tiene jugadores muy rápidos”, mencionó Harold Villalobos, seleccionado nacional.
Agregó que en este momento lo más importante es enfocarse en las fortalezas del combinado patrio. Aún faltan algunos meses para el debut, por lo que esperan aprovechar el tiempo para dejar el nombre del país en alto. Esta será la primera vez que Costa Rica participe en este certamen.
El equipo nacional está compuesto por 19 jugadores, de los cuales solo 15 irán a la Copa del Mundo. De momento están en vacaciones, debido a que el campeonato nacional acaba de terminar.
“Los jugadores están en un descanso activo, a partir del 9 de agosto empezamos una seguidilla de 27 entrenamientos, así nos mantendremos hasta el 21 de octubre, el 24 salimos para Guadalajara, tendremos tres fogueos ante El Salvador”, explicó el técnico.
La Asociación de Fútbol para Amputados cuenta con 70 miembros, desde que se fundó hace tres años, está integrada por niños, niñas, hombres y mujeres.
PARTIDOS DE LA SELE
Polonia-Costa Rica 28 octubre
Costa Rica-Japón 29 octubre
Costa Rica-Colombia 30 octubre
Glen Pérez, portero:
“Perdí el brazo en una máquina de embutidos”
Hace 12 años Glen Pérez trabajaba en una fábrica de embutidos, un día llegó tarde a su trabajo, un compañero hizo su labor, pero dejó la máquina en automático y cuando él llegó a usarla, esta le prensó el brazo.
“Hace 10 años estoy casado, tengo una hija de 6 años. Le doy gracias a Dios por todo, tras el accidente mi vida dio un giro de 180 grados, pero para bien, porque a mis 23 años era un poco desordenado”, manifestó.
Su objetivo es representar al país con orgullo. El año pasado jugó el certamen centroamericano con la Tricolor y se dejó el galardón al mejor arquero de la región. Desde hace dos años y medio está en la sele.
Joshua Santana, futbolista:
“Me creí superhéroe y me le metí a un toro”
De pequeño hizo divisiones menores en Alajuelense, fue compañero de varios futbolistas que ahora figuran en el campeonato nacional y fuera del país, como Giancarlo González, sin embargo las malas decisiones no le permitieron llegar lejos.
“En el 2009 cometí un error muy grande, me creí un superhéroe y me le metí a un toro en el redondel de Zapote, me quebró la tibia y el peroné. En el 2016 llegué a alcanzar 20 cirugías y fue cuando me hicieron la amputación”, explicó.
Asegura que llegar al Mundial de México representa una gran ilusión, una experiencia muy enriquecedora. Considera que es un sueño hecho realidad, el cual cree que no hubiera logrado materializar teniendo las dos piernas.
Jonathan Solano, futbolista:
“Un cáncer de tibia originó mi amputación”
A sus 23 años Jonathan Solano, vecino de Cartago, retomó sus estudios universitarios, está pronto a graduarse como ingeniero en sistemas, carrera que pausó en algún momento por la pérdida de una pierna.
“A mí se me generó un cáncer en la tibia que originó la amputación. Todo comenzó como un dolor leve después de una mejenga en el año 2016, me empecé a hacer exámenes y en una resonancia salió que había un cáncer”, recordó.
Asegura que su vida es normal, sin embargo tras su padecimiento logró darle un giro a su vida y explotar habilidades que antes ni conocía, por ejemplo la socialización con las personas. “Antes me costaba mucho hablar, ahora trabajo mucho en eso”, comentó.