Resulta inaudito, inimaginable y descarnadamente indignante el darse cuenta de hasta dónde llegan la desfachatez, el descaro y la insensibilidad del presente Gobierno de Carlos Alvarado, cuando en una reciente reunión entre el Gobierno la junta directiva de la CCSS y los dos nefastos “Rodrigos”, el presidente del Banco Central y el Ministro de Hacienda, ambos sacados nada más y nada menos que “de las entrañas” del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial (ya podrán imaginarse ustedes las retorcidas ideologías neoliberales que los impulsan); producto de dicha reunión, el Ministro de Hacienda se dejó decir prácticamente que nuestro “trapito de dominguear”, nuestra eficiente y hasta ahora fortalecida CCSS, en este momento ya es un Institución desahuciada, según el Ministro ya no hay plata que pueda salvarla; ¡alerta costarricenses!; es increíble la alharaca que está promocionando este Gobierno para sacar plata de donde puedan, incluso trasladar al Gobierno los millonarios superávits de otras Instituciones con el cuento de paliar la pandemia del coronavirus, y amenazan hasta con reducir los salarios del sector público y con eliminar hasta el salario escolar, “¡un ataque frontal a la clase trabajadora!”. Recordemos que las verdaderas causas de la presente crisis fiscal ya venían acumulándose desde antes de que apareciera el Covid-19 y causadas por el mismo Gobierno, y hasta el momento aún no se ven con claridad los frutos de la ayuda prometida a los ciudadanos, todo suena muy lindo en el papel y de la boca para afuera, pero en la realidad no se ven esas soluciones inmediatas y concretas que urgen a corto plazo.
Ya vimos las millonadas de ¡dólares! de empréstitos aprobados por la Asamblea Legislativa, sin ninguna certera claridad de “cómo” y “en qué” serían empleados (así comienzan los inconmensurables y mal llamados “huecos fiscales”, como los que dejó el “adalid” de la ética del PAC Guillermo Solís, cuando “embarcó” a todos con aquella “cantaleta” de que “Con Costa Rica no se juega”); huecos fiscales que no son otra cosa que descarados robos a las arcas públicas con toda impunidad y sin ningún castigo y que seguirán hipotecando al país; y lo peor; todo esto lo están haciendo aprovechándose de la terrible realidad de esta pandemia que nos está acosando, en momentos en que el pueblo se encuentra más débil, más temeroso y más vulnerable, más “desconcentrado” (una muestra más de la “negra consciencia” de esta gente). Este asunto del coronavirus no se soluciona tan solo con un burdo remedo de “conferencia de prensa”, montando casi un show mediático en TV; exponiendo “numeritos” y llevando las “cuentitas” de los nuevos contagiados y de los fallecidos; por algo ahora sí “dan la cara” en TV; pero cuando estaba “al rojo vivo” el gravísimo caso de la UPAD, ¡todos se andaban escondiendo! (empezando por Carlos Alvarado). Enfrentar la seria situación actual del país requiere de auténtica seriedad y de una profunda reestructuración en la estructura macroeconómica de la nación; y lo más increíble; es que ya están hablando hasta de justificar y sacrificar en el altar de la pandemia a otros -hasta ahora intocables- activos del Estado, y proponen vender, o sea ¡privatizar! hasta los mismos bancos, las Instituciones Autónomas; el ICE, el INS y la Caja misma, es decir, todo lo que no pudieron hacer anteriormente por la fuerza y con engaños, pretenden imponerlo ahora con la “farsante justificación” de la pandemia.
Costarricenses; es hora de concentrarnos en superar esta dramática situación de salud pública, pero también es hora de que durmamos “con un ojo cerrado y otro abierto”, en lo que respecta a este fluctuante Gobierno; que aunque se le puede reconocer que ha actuado con “relativa” responsabilidad en la atención de esta crisis de salud pública, tampoco se vale que salgan en la TV poniéndose una flor en el ojal, que más parece burda propaganda política; cuando en realidad los contundentes y efectivos resultados para evitar la propagación de este virus, además de los responsables ciudadanos que han cooperado con el confinamiento, ante todo, ha sido nuestro probado, cimentado e invaluable sistema de salud pública, nuestra irremplazable CCSS; esa misma que estos “modernos filibusteros” ya quieren asfixiar cortándole el financiamiento; ¡eso es jugar con la vida y la muerte de todos los ticos!
Costarricenses, lo que está ocurriendo es extremadamente alarmante; cualquier descalabro que se dé de aquí en adelante en los destinos de nuestra Nación, e impulsada por estos modernos “mercenarios mal llamados políticos”, una vez consumada, ¡no tendrá vuelta atrás!, para eso querían eliminar las huelgas, para que no tuviéramos derecho ni a protestar.
Ya lo dijo adelantándose a estos oscuros tiempos el Iluminado Maestro Mahatma Gandi cuando sentenció: “en el mundo hay suficiente para el bienestar de todos; pero nada será suficiente ¡para la enfermiza avaricia de unos cuantos!”.
*Poeta y músico