Ciudad del Vaticano. (EFE) – El papa Francisco pidió en su primer mensaje pascual por la paz para el mundo, principalmente en Siria, África y Corea del Norte.
Ante unas 250 mil personas que llenaron la Plaza de San Pedro y las calles anexas, el Obispo de Roma expresó su satisfacción por comenzar el pontificado con la Semana Santa \”y poder anunciar que ¡Cristo resucitó!\”.
Seguidamente abordó el papamóvil y saludó con una sonrisa a niños y adultos. Miles ondearon las banderas de sus países y carteles de apoyo.
\”Quisiera que llegara sobre todo al corazón de cada uno, porque es allí donde Dios quiere sembrar esta buena nueva: Jesús ha resucitado, hay esperanza, ya no estás bajo el dominio del pecado del mal. Venció el amor, triunfó la misericordia\”, afirmó.
Asimismo, el Papa argentino invitó a los fieles a transformar su vida, a custodiar toda la creación y hacer florecer la justicia y la paz, además los exhortó a pedirle a Jesús que cambie el odio en amor y la venganza en perdón.
CESE DE ARMAS
Francisco aludió a la situación en el mundo y pidió paz en la península coreana \”para que se superen las divergencias y madure un renovado espíritu de reconciliación\”.
En ese recorrido se detuvo en Oriente Medio y solicitó estabilidad entre israelíes y palestinos, \”que tienen dificultades para encontrar el camino de la concordia, para que reanuden las negociaciones con determinación, para poner fin a un conflicto que dura ya demasiado\”.
\”Paz para Irak, y que cese definitivamente toda violencia, y, sobre todo, para la amada Siria, para su población afectada y los tantos refugiados que están esperando ayuda y consuelo. ¡Cuánta sangre derramada! Y ¿cuánto dolor se causará todavía, antes de que se consiga encontrar una solución política a la crisis?\”, agregó.
También se detuvo en África, Malí y Nigeria. Tampoco faltó República Democrática del Congo y la República Centroafricana.
BENDICIÓN Y SALUDO
Concluido el mensaje, impartió la bendición \”Urbi et orbi\”, a la ciudad de Roma y a todo el mundo. Lo hizo solo en italiano. Hasta ahora Juan Pablo II y Benedicto XVI lo hicieron en 65 idiomas, entre ellos el español, portugués y guaraní.
Previamente Francisco ofició la misa de Resurrección en la plaza vaticana, adornada con 40 mil flores multicolores, que la convirtieron en un jardín.
El Santo Padre ofició la misa pocas horas después de que celebrara la Vigilia Pascual, en la que dijo que la resurrección de Cristo es la victoria sobre el mal y lo que oprime en la vida, e invitó a los que son \”indiferentes\” ante Dios a \”que arriesguen, ya que no quedarán decepcionados\”.
También afirmó que no hay situaciones que Dios no pueda cambiar y que no hay pecado que no pueda perdonar si nos abrimos a Él, y que por ello no debemos perder la confianza.