Por más que se hable de que los tiempos han cambiado y que cada vez es menos común apreciar muestras públicas de afecto, el 14 de febrero llenó de flores, chocolates y corazones la Avenida Central de San José.
Con una breve visita realizada por DIARIO EXTRA al principal bulevar de la ciudad capital se pudo observar a decenas de enamorados portando orgullosos los obsequios con los que buscan conservar viva la llama del amor en sus parejas, o, porque no, conquistar a su amor platónico.
De igual forma, las calles josefinas se colmaron de vendedores ambulantes que aprovecharon San Valentín para vender toda clase de detalles para las parejas, como peluches, globos, dulces, tarjetas y, por supuesto, ramos de flores en todos los tamaños y presentaciones.
Así mismo, El Periódico de Más Venta en Costa Rica se acercó a las floristerías: Kiosco de las Rosas y La Central, ubicadas en la Plazoleta Castro Madriz, al costado norte del Banco Negro, las cuales desde hace décadas se convirtieron en punto de referencia para los flechados por Cupido.
Ahí, decenas de tiernos enamorados escogían entre la diversidad de arreglos florales que iban desde los ¢2.000 y hasta más de ¢30.000, los cuales aguardaban para convertirse en ofrendas pasionales.
14 DE FEBREROEN COSTA RICA
A pesar de que San Valentín no está reconocida como una fecha de celebración oficial por el Estado costarricense y que la Iglesia Católica priorice en su santoral del día a San Cirilo, monje; y San Metodio, obispo, desde el concilio de 1969 son muchos los devotos de este santo.
El origen de la fecha se remonta al siglo III cuando el emperador romano Claudio II prohibió los matrimonios por creer que los solteros eran mejores soldados, sin embargo, un sacerdote llamado Valentín continuó casando parejas a escondidas, por lo que fue ejecutado un 14 de febrero.
Con el tiempo la historia se hizo famosa en Europa y en el siglo XIX llegó a la costa oeste de Estados Unidos donde los comerciantes aprovecharon la fecha para vender miles de tarjetas impresas.
A partir de entonces, la tradición se extendió por el mundo y a mitad del siglo XX se asentó en Costa Rica, sobre todo con el impulso de los medios de comunicación masivos, televisión y radio.