Basándose en supuesta amenaza química.
Mary Munive, ministra de Salud Pública, compareció ante los diputados de la comisión especial de la provincia de Cartago para rendir explicaciones sobre por qué su despacho no concedería el permiso del funcionamiento en caso de que el nuevo Hospital Dr. Max Peralta se construya en El Guarco.
La funcionaria argumentó que no se le puede conceder el permiso porque sería un riesgo debido a que se encuentra en una zona industrial, lo que significa una amenaza latente de accidente químico.
“Están diseñando un hospital cerca de industrias y no es en contra de las industrias, sino para salvaguardar a las personas (…) Es un hospital, no cualquier casita”, sentenció.
Ante la postura de la ministra, los miembros de dicha comisión cuestionaron que Munive es la nueva ficha que utiliza el Poder Ejecutivo para obstruir la construcción del hospital.
Incluso, el legislador Antonio Ortega dijo que primero fue Marta Esquivel (presidenta ejecutiva de la Caja) quien tuvo esa misión, sin embargo, como no resistió, ahora asignan a Munive.
“¡Usted está adelantando criterios!”, dijo la diputada Paulina Ramírez luego de cuestionarla con el argumento de que Munive no era ingeniera química para basar su postura en que la amenaza química es latente.
Por su parte, la oficialista Pilar Cisneros defendió la postura del Gobierno al oponerse a esta construcción indicándole a sus colegas que era un asunto “de sentido común”.
“En cuanto esté más lejos el hospital de estas industrias es mejor. Es por esto que el Gobierno se ha opuesto a construir ahí. ¡En el terreno hay cuatro industrias químicas!”, agregó.
¿HAY ALTERNATIVAS?
No obstante, aunque Munive fue cuestionada sobre alguna otra alternativa por la que se podría optar debido al deterioro del centro médico cartaginés, dijo que buscar esas alternativas era responsabilidad de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
“Ya he hablado con doña Marta (Esquivel) y le he solicitado que pongamos ya la solución porque esto se ha vuelto una novela que realmente profundizar en la misma no lleva a nada”, manifestó.
La ministra agregó que no se trataba de no querer otorgarles un hospital nuevo a los cartagineses, sino más bien de garantizarles un hospital seguro, que no corriera riesgos.
El lote adquirido por la Caja hace más de 10 años está rodeado de fábricas, por lo que se cataloga como “Zona Industrial Tipo 3” y no es apto para albergar un hospital.
Mientras se posterga una decisión final sobre lo que pasará con el nuevo hospital, la infraestructura del Hospital Dr. Max Peralta, en el corazón de Cartago, continúa deteriorándose.
Tanto la Contraloría General de la República como la Defensoría de los Habitantes externan su preocupación por la saturación en los servicios de ese centro médico.
De momento se espera el criterio de la junta directiva de la CCSS que defina qué pasará con el nuevo hospital. De igual forma, ya se sabe que la posición del Ministerio de Salud es negarle el permiso de funcionamiento.