Un hecho insólito se presentó en la iglesia católica de La Asunción de Ciudad Colón, el cual fue reportado a la Fuerza Pública. El sacerdote de la iglesia y su sacristán fueron amordazados y amenazados de muerte por parte de dos sujetos que, tras varias horas de inteligencias policiales, fueron capturados.
La Fuerza Pública y la Policía Municipal del cantón de Mora coordinaron acciones para esclarecer estos hechos denunciados por el sacristán, sin identificar, que logró llegar hasta la delegación policial indicando lo que sucedía en la iglesia.
COBRO
La versión del sacristán, que conocieron en primeras instancias los oficiales que estaban de guardia, indicaba que dos sujetos ingresaron de forma violenta a la casa de Dios y tras ubicar al padrecito lo increparon para que realizara el pago de un dinero del cual no se tiene idea si existía la obligación o era porque había una deuda.
El ayudante del padre externó que los matones, al ver que el religioso no iba a hacer pago alguno, registraron la iglesia y la casa cural y no perdonaron ni las limosnas, llevándose el dinero recolectado en las misas del fin de semana.
“Alrededor de las 11 de la noche, se reporta el ingreso de dos masculinos a las instalaciones de la iglesia católica con la intención de cobrarle una plata al padre y, al negarse a entregar el dinero, amordazan al padre y al sacristán y toman las llaves para dirigirse a la casa cural. El sacristán logra zafarse de las ataduras y un taxista lo lleva a pedir ayuda la delegación policial”, manifestó Roberto Mora, jefe de la delegación de la Fuerza Pública de Mora.
Gracias a la alerta del sacristán, se logra capturar a uno de los sospechosos en la escena y, pese a que su socio logra huir, gracias a labores de inteligencia policial, los oficiales tienen acceso a mensajes que envía a su compañero ya capturado, e ignorando que se comunicaba con la Policía, dio a conocer su ubicación y minutos después lo aprehendieron.
“La Policía logra ubicar y arrestar a uno de los sospechosos y minutos después el otro sospechoso, que logró fugarse, comienza a contactar por WhatsApp al sujeto detenido y gracias a una labor de inteligencia con la Policía Municipal y la Fuerza Pública, usando un carro discrecional, logran capturar por el sector de las Popas. Posteriormente, son reconocidos por el padre y el sacristán”, relató Mora.
El padrecito y el sacristán se presentaron a la Fiscalía de Flagrancia, donde pusieron la denuncia contra ambos sujetos vecinos de Heredia, según trascendió.