Ni siquiera una orden judicial de la Sala Cuarta le ha permitido seguir trabajando al mecánico Iván Arrieta, quien todavía sigue sin poder llevar los vehículos de sus clientes a la estación de servicio de Riteve en Puntarenas.
Según una nota oficial en poder de DIARIO EXTRA, Arrieta se presentó el martes a las instalaciones para proceder a hacer la revisión de su vehículo, pero el supervisor de esa estación, Roberto Moya, le indicó que no podía dejarlo ingresar por órdenes de su superior y que debía ir al departamento legal.
Unos minutos después el propio Moya regresó donde Arrieta y le dijo que entrara pero que de ahora en adelante su ingreso estaba condicionado a que él fuera quien sacara la cita para el vehículo que iba a llevar a revisión, además tampoco podía delegarle la función a uno de los empleados de su taller mecánico.
“Esto está afectando mi negocio porque sigo siendo el único mecánico al que le ponen estas limitaciones de ingreso al plantel, que además no tienen fundamentación, ya que ellos mismos se han negado a dármelas”, denunció Arrieta.
Además aseguró que la única razón por la cual tiene problemas en ese lugar es por siempre defender sus derechos y el de sus clientes, ya que se ha topado con situaciones donde los equipos de revisión técnica están mal calibrados y él exige, como es su derecho, que se le pase por otra máquina para corroborar el resultado de una prueba, situación que no les gusta a quienes trabajan en esa estación.
FALLO A FAVOR
En el fallo, del cual DIARIO EXTRA tiene una copia completa, los magistrados hacen ver que Riteve no tiene un reglamento para el ingreso de vehículos por terceros que no sean sus propietarios registrales. De manera que insta a la empresa a evitarse el riesgo de lesionar los derechos de ambas partes.
En este sentido Arrieta indicó que al no existir ninguna norma que prohíba que él lleve carros de sus clientes a revisión técnica, el que nuevamente se le vuelva a condicionar el ingreso a ese plantel es una clara violación al fallo de la Sala, que expresamente estimó que “sí se ha violado el derecho a la no discriminación del recurrente”.
El periódico de más venta en Costa Rica intentó comunicarse con el gerente de Riteve, pero al cierre de edición este no había devuelto el correo que le enviamos, tampoco fue posible localizarlo en su oficina.