El año 2020 cerró con un aumento en los homicidios, de acuerdo con las autoridades por culpa de la pandemia debido a que destinaron los oficiales al resguardo y cumplimiento de las medidas de restricción. No obstante, estas han facilitado el trabajo de los sicarios y de las organizaciones de crimen organizado.
El experto en seguridad Gerardo Castaing afirma que la tasa de homicidios en tiempos normales puede superar el dato registrado en tiempos de pandemia (568 al 30 de diciembre del 2020).
Esto puede obedecer a varios factores, uno de ellos es que con la restricción de movimiento algunas personas se dedicaron a consumir algún tipo de droga como medio paliativo para sobrellevar la situación.
El consumo se traduce en una mayor venta de drogas y, a la vez, en una mayor cantidad de dinero para los grupos vinculados con el narcotráfico.
Cuando se incrementa el flujo de dinero y ventas, cada grupo cuida celosamente su mercado, para evitar que otra banda invada su territorio, esto causa los asesinatos.
“Haciendo la diferencia entre homicidios y asesinatos, los asesinatos son cuando matan a alguien a cambio del pago de una recompensa o a cambio de un bien y los homicidios como consecuencia de situaciones emocionales, la situación con los asesinatos entonces es lo que se está produciendo, lo que ha crecido como consecuencia de esta situación”, explicó.
Sobre el cambio en el horario de los ilícitos, destacó que la restricción ha causado una menor movilización de automóviles, pero no ocurre lo mismo con las motocicletas.
“Pareciera más bien que en la pandemia al tener a la gente ubicada en sitios más o menos fijos facilita la comisión de asesinatos, que es otra posibilidad que el gobierno no lo ha determinado así, es una cuestión de que, en el día, por ejemplo, la gente está más apegada a un ciclo que en tiempos normales y eso puede ser también una ventaja para el narcotráfico cuando necesita eliminar a algún sujeto”, explicó.
FALLAS
Castaing señaló que existe una falla en la contención, en la prevención, aunque no culpa a la Fuerza Pública, cuerpo policial que debe encargarse de que esos delitos no se cometan.
“Si se están cometiendo los delitos es porque no se está dando abasto con el objetivo de la policía administrativa que es evitar precisamente el desarrollo de esas acciones delictivas, la situación pareciera que se debe a varias fallas tácticas, por ejemplo eso de las rotativas y las sirenas las 24 horas del día lo que está haciendo es avisándoles a los delincuentes, a los sicarios que la policía se está aproximando y un sicario no va a ser tan falto de inteligencia de ver que viene una patrulla por medio de las luces y ejecutar una acción, simplemente lo que van a hacer es dejar pasar la unidad y luego cometer el delito y ya lo he dicho varias veces, eso tienen que corregirlo, no está dando resultado”, adujo.
Añadió que “el éxito o el fracaso de una operación se mide precisamente por el resultado y si el resultado está siendo un fracaso no hay nada que discutir, hay que mejorar el procedimiento porque no están sirviendo para el fin que se busca”.
El experto señaló que siempre se han atendido asesinatos a todas horas del día y en distintos lugares, con la tendencia de que los sicarios siempre buscan la ventaja para ellos, quitándole a su víctima la oportunidad de defenderse.
“En realidad es la ejecución de una sentencia de muerte por parte del narcotráfico y se ejecuta en cualquier lugar, yo no veo que haya una diferencia tan grande, lo único es que por la restricción ya en la noche les es más difícil movilizarse y tienen que ejecutar las acciones en el día”, recalcó.