Luego de una brutal paliza que recibió el privado de libertad Johel Mairon Cabrera Calvo, dentro de una celda del I Circuito Judicial de San José, decidió romper el silencio y contar los pormenores del pleito que lo mantienen con el brazo izquierdo dislocado.
Cabrera, de 20 años de edad, descuenta una pena de 3 años y 4 meses de prisión por el delito de robo agravado en la cárcel La Leticia en Guápiles donde este martes recibió un equipo de DIARIO EXTRA, tras ser valorado por un ortopedista quien le revisó su extremidad.
Esposado, con una pantaloneta verde y camiseta de tirantes negra, dejando ver sus numerosos tatuajes, el joven reo aseguró que no le tuvo miedo al grupo de custodios que tras la agresión se defendió como cualquier ser humano.
“Ayer (lunes) me soñé que ese oficial me estaba golpeando, lo que provocó que me levantara todo asustado, mis compañeros de celda vieron mi reacción”, fue lo primero que dijo durante la entrevista.
¿Cómo fue la bronca que tuvo con los custodios del OIJ?
R/ El problema comenzó en las celdas de Goicoechea donde tuve una discusión con un oficial llamado José, me dijo que a él no le importaba nada de mí sólo porque era un privado de libertad.
¿Qué tipo de problemas tiene usted con ese oficial?
R/ Cuando me bajó de la perrera, me dijo que él era quien mandaba, le pregunté que si tenía alguna diferencia conmigo y me aseguró que sí, que le caía mal. También lo cuestioné sobre qué era lo que quería y empezó a insultarme.
¿El funcionario judicial lo retó a pelear?
R/ José y otro oficial se metieron a la celda y fue cuando me dijo en el oído que si me quería agarrar con él, le respondí que en el momento que me golpeara me iba a defender y empezamos.
¿Lo esposaron para darle?
R/ Primero me dio en la espalda y luego en el brazo, después me cayó encima y me fracturó el brazo; me tiraron al piso con una mano esposada. Luego me las quitaron, me levantaron y me pusieron al frente de un oficial y me golpeó, fue donde me defendí.
¿Primera vez que vivía algo similar?
R/ En Limón lo había vivido muy a menudo, pero con otros compañeros ya que ahí no hay cámaras; en Goicoechea se han dado varias veces, en San José es la primera vez conmigo.
¿Son los oficiales intocables?
R/ Algunos sí, no se les puede decir nada porque quieren abusar de uno; las broncas son principalmente por la comida. Cuando uno les dice que no, come cierta cosa, lo cogen como reclamo.
¿Denunció a los custodios que lo agredieron?
R/ Asuntos internos del Poder Judicial me dijo que los denunciara porque tenían que pagar por lo que hicieron.
¿Teme volver a caer en esas celdas?
R/ No en San José, temo llegar a Goicoechea donde está la gente que me golpeó, a cada rato voy ahí ya que tengo varias causas pendientes.
¿Cuál es el sentir de otros privados de libertad que deben llegar a esas celdas?
R/ Están atemorizados porque les puede pasar algo igual.
Johel Mairon Cabrera Calvo, ingresó el 22 de noviembre del 2012 a la cárcel de San Sebastián y por problemas de convivencia fue trasladado el 5 de abril del 2013 hasta el centro penal La Leticia en Guápiles, donde cuatro días después fue sentenciado.
Además, enfrenta dos causas también por robo agravado, por lo que suele visitar las celdas judiciales en San José.