Una huelga sin precedentes en la historia nacional está por estallar en cuestión de horas en las fincas piñeras de la zona norte, según lo confirmó ayer Édgar Morales de la Unión Nacional de Trabajadores, que tiene cientos de afiliados en ese lugar.
Una huelga sin precedentes en la historia nacional está por estallar en cuestión de horas en las fincas piñeras de la zona norte, según lo confirmó ayer Édgar Morales de la Unión Nacional de Trabajadores, que tiene cientos de afiliados en ese lugar.
“La situación laboral en las piñeras de la Zona Norte es una bomba de tiempo que estallará en cualquier momento. Las personas ya no soportan la sobreexplotación y los empresarios se hacen de oídos sordos. El Ministerio de Trabajo parece estar “pintado en la pared”, sostuvo Morales.
Comentó que a pesar de la represión que existe hacia quienes levantan la voz para defender sus derechos, en las fincas piñeras empiezan a perder el miedo y hartos de ser maltratados y explotados recurren a acciones como la huelga para ser escuchados.
“Hoy, un día después de la Conmemoración del Centenario del 1 de Mayo, un grupo de alrededor de 30 trabajadores de una cuadrilla en la finca piñera Finca Once, ubicada en Pavón de Los Chiles, se ha declarado en huelga. Esto como medida de presión para exigirle al contratista que aumente el precio del hijo de piña. A esta le seguirán más en las próximas horas”, comentó Morales.
Explicó que esa finca piñera, para evadir sus responsabilidades laborales y sociales, recurre a un contratista que mantiene laborando a nicaragüenses indocumentados, sin asegurarlos ni pagarles el salario mínimo.
Según explicó desde hace 3 años a estos trabajadores se les paga ₵2.78 por hijo de piña deshijado. Ellos trabajan por contrato y a pesar del esfuerzo sobrehumano que realizan, no logran ganar más de ₵6.000 diarios, salario que no les es reajustado al mínimo legal.
Desde hace algún tiempo esos trabajadores han venido solicitando que se les aumente el precio por hijo a ₵4. No obstante, el contratista, lejos de atender una demanda justa de los trabajadores, los amenaza y ayer mismo los ha despedido verbalmente, indicándoles que “ahí no quieren gente vaga”.
“Se han hecho esfuerzos por parte del Ministerio de Trabajo, sin embargo, con prepotencia y altanería, los representantes de estas empresas se burlan del Ministerio de Trabajo y de la institucionalidad costarricense, negándose a cumplir con la legislación laboral”, finalizó Morales.