Las autoridades panameñas anunciaron este sábado que concluyó diligencias de \”levantamiento\” de 10 cuerpos de migrantes que murieron por la crecida de un río en la zona selvática de Panamá.
\”La personería de la comarca Guna Yala concluyó las diligencias de levantamiento de 10 presuntos migrantes fallecidos por inmersión en (la comunidad) Carreto\”, señaló la Procuraduría General de la Nación en su cuenta en la red social X.
El pasado 24 de julio el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) dio a conocer que 10 migrantes murieron por la crecida de un río cercano a la comunidad de Carreto, en la comarca indígena de Guna Yala.
Un día después, el presidente panameño, José Raúl Mulino, dijo que el balance de migrantes muertos era de 16.
Este sábado la Procuraduría General de la Nación indicó que \”por ahora\” los 10 cuerpos recuperados son los que se tienen \”luego de tres días de diligencias\” que realizó junto al Senafront y el Servicio Nacional Aeronaval (Senan).
La comarca indígena de Guna Yala, cerca de la frontera con Colombia, es una aislada zona selvática que se ha convertido en corredor de miles de migrantes que desde Sudamérica marchan hacia Estados Unidos.
En semanas recientes el gobierno panameño cerró varios senderos utilizados por migrantes en la jungla del Darién y abrió un \”corredor humanitario\” para controlarlos y evitar que sean atacados por bandas criminales.
Las autoridades panameñas desconocen el número exacto de personas que mueren en esta travesía por lo inaccesible de la selva y porque a veces los cuerpos son devorados por animales.
En 2023 más de medio millón de migrantes cruzaron esta jungla, de 575.000 hectáreas, pese a peligros como ríos caudalosos, animales salvajes y grupos criminales.
La mayoría son venezolanos, aunque también figuran ecuatorianos, colombianos, haitianos y chinos.