Luego del terrible accidente que vivió Adriana Solís Vega, representante del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), después de que el helicoptero del Servicio de Vigilancia Aérea se estrellara logramos conversar este martes con ella en su casa, en Dulce Nombre de La Unión. El lunes a las 10 p.m. le dieron la salida y nos relató en medio del dolor de los golpes en las costillas, el brazo y la ceja (con 4 puntos de sutura) la odisea y el milagro de estar con vida.
Ella se fue desde el miércoles para el proceso electoral del domingo, llegaron hasta Grano de Oro, en Turrialba, y el viernes ingresaron a los territorios indígeneas en helicóptero, luego regresaron hasta Grano de Oro donde les indicaron estar listos desde las 7 a.m. para comenzar la salida el lunes de los 32 personeros del TSE y del material electoral.
Ella abordó la aeronave matrícula MSP-103, año 1984, pues un compañero prefirió cederle el campo, ya que por peso era muy peligroso que volaran los dos, de hecho el helicóptero debía hacer varios vuelos para sacar las 16 unidades de 2 miembros cada una.
La tula 3.952 nunca estuvo en peligro ya que no voló con ella, describió Adriana, el otro compañero se la dejó en Tierra, sin embargo, ahí es donde viene lo impensable.
\”Yo me subí y como le tengo miedo a las alturas nada más vi para abajo, no vi alrededor porque me da mucho miedo y comenzó a dar vueltas, en eso escuché al piloto que dijo: \”No puedo controlarlo\” y caímos, no recuerdo nada más, creo que fueron como 3 vueltas las que dimos antes de tocar tierra, nunca tocamos los árboles, pues no había ninguno caído\”, indicó la funcionaria.
Como mujer biónica
Adriana explicó que al verse con todas las cosas y el helicóptero encima, las puertas estaban trabadas del leñazo, pero como si fuera la mujer biónica, tal vez por misma adrelina, se quitó las cosas de encima y salió del aparato.
Llegó corriendo donde estaban los aborígenes, uno de ellos la agarró, tenía la cara ensangrentada por el corte en su ceja y de ahí la llevaron hasta el puesto de salud indígena, donde después de valorarla, llegó otro helicóptero para trasladarla junto a los pilotos, a lo cual se negaba, dijo sentirse aterrorizada con la primera experiencia y ahora le pedían que se montara en otro helicóptero pasados pocos minutos del accidente.
Al final aceptó únicamente porque el piloto era conocido suyo, esposo de una amiga.
Mamá casi muere del susto
En tanto, doña María Isabel Vega, madre de la muchacha, dijo que solo Dios y la virgen la tienen con vida, es un milagro; ambas son marianas ,de hecho en su hogar hay una imagen de la virgen a quien doña María simpre encomienda a su familia, hasta una oración de la Santa Cruz le dio a su hija para que la proteja.
Doña María trabaja en la Caja del Seguro Social y ahí por medio de los compañeros de Comunicaciones se enteró del accidente y casi se muere del susto.
\”Recuerdo que lo primero que me dijo cuando me vio fue: \”Ay, mami, me duele mucho\”. Preguntó por Tamara (la hija), entonces la tranquilicé diciendo que mientras esté con nosotros estará bien, que los tíos y el hermano se preocuparon mucho. De hecho, su hermano Marco me reclamó porque no le dije lo que le había pasado a ella\”.
Adriana no escatimó en agradecerle a todo el personal del Hospital México que la atendieron como una reina, igualmente agradeció a los pilotos Francisco Allón y Sebastián Gadea, porque por ellos dice estar con vida, gracias a la maniobra que hicieron, era para matarse los 3.
De momento, mencionó que Luis Antonio Sobrado, presidente del Tribunal Supremo de Elecciones, la llamó para saber su estado de Salud y lo preocupado que estaban, pese a que Adriana solo tiene 4 meses de trabajar para el ente electoral, le pagan por servicios profesionales, ella no está en propiedad, aunque después de esto como que se ganó el puesto a pulso.
Ahora solo piensa en la recuperación, tiene que ir al Instituto Nacional de Seguros para la valoración, está tomando ibuprofeno para el dolor, pero lo cambió por la arcoxia por ser más efectiva y solo quiere pasar este tiempo al cuidado de su hija Tamara, de 5 añitos, y su mamá, quien ahora está de vacaciones.
Le preocupa perder este cuatrimestre que recién inició en la universidad, donde estudia Administración de empresas, también aseguró que irá en la segunda ronda con todo gusto, eso sí en carro. No quiere saber nada en mucho tiempode un helicoptero o algo que se le parezca.
CETAC AYUDARÁ A SVA
Intentamos conversar con los pilotos del helicóptero, pero por medio de la oficina de prensa del Ministerio de Seguridad Pública dijeron que se encontraban incapacitados y no darían
declaraciones, además, se está llevando a
cabo el proceso investigativo de lo ocurrido. A ambos les dieron de alta este lunes del centro médico.
Por ello, consultamos a la oficina de prensa del Ministerio de Obras Públicas y Transportes, donde relataron que la aeronave siniestrada por no ser de corte civil, sino gubernamental, ellos no están facultados para abrir investigaciones; recalcaron el hecho que ya en el Servicio de Vigilancia Aérea (SVA) les solicitaron la ayuda correspondiente para que los ingenieros del Consejo Técnico de Aviación Civil intervengan en la investigación y determinaran lo ocurrido.