El Gobierno de la República dio a conocer la reactivación de la reapertura de ventanilla para tramitar el bono de vivienda tras una parálisis del servicio por 18 meses.
Los líderes gubernamentales del sector vivienda tuvieron la posibilidad de tomar la decisión de poner en marcha un proyecto que la administración anterior enterró.
La Junta Directiva del Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi) acordó el 16 de enero anterior proceder a la reapertura gradual con el propósito de que las entidades con nuevas solicitudes atiendan la demanda de fondos económicos y financiar vivienda de interés social.
Jessica Martínez, ministra de Vivienda y Asentamientos Humanos y presidenta ejecutiva del Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU), indicó que existe un interés de revivir paulatinamente el programa de vivienda afectado hace 18 meses.
Martínez sostuvo que para el presente año se cuenta con un presupuesto de ¢108.425 millones en el que se estima la colocación de unos 9.743 bonos familiares de vivienda en 2023.
El llamado de la ministra se hizo en la dirección de recibir el bono para la construcción, adquisición, mejora o reparación de vivienda en cada una de las 25 instituciones autorizadas para efectuar el trámite en cuestión.
“Por ley, corresponde a estas entidades la recepción de solicitudes y calificación de las familias. De cumplir con los requisitos, el Estado a través del Banhvi gira los recursos para construir en lote propio, adquirir un terreno y construir, comprar una casa terminada o bien, reparar, ampliar o mejorar la casa que habitan, según la necesidad de la familia”, indicó la jerarca.
La institución recordó que para la solicitud de un bono en una institución autorizada debe contar con ingresos familiares menores a ¢457.815, no tener casa propia; no haber recibido el bono en el pasado y ser costarricense o tener residencia legalizada.
Dentro de los requisitos del bono ordinario se encuentran el de contar con ingresos familiares por debajo de ȼ1.831.260, suma que debe incluir lo que devengan todos los miembros mayores de edad, formar parte de un núcleo familiar; no tener casa propia; no haber recibido el bono en el pasado y ser costarricense o tener residencia legalizada.
Las familias de clase media pueden optar por modalidades como Bono diferido, Bono crédito y Segundo Piso en lote de un familiar.
“El Gobierno ratifica su compromiso de dinamizar el otorgamiento del subsidio, para que se adapte a las necesidades de la población” concluyó la jerarca.