El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuvo a un juez de apellido Lizano como sospechoso de intentar asesinar a su jefe inmediato, identificado como Jorge Paisano Saborío (de 45 años de edad) por supuestos problemas laborales y amorosos.
Versiones extraoficiales indican que en un aparente romance con la mujer de un sujeto, conocido como “Chayote”, llevó a las diferencias por las cuales en apariencia habría solicitado la suspensión de Lizano de su puesto.
Inclusive, el ahora detenido cuenta con varias pensiones alimentarias, por lo que no le llega el salario completo. Sin embargo, anda en lujosos vehículos como un Mitsubishi Montero.
La detención de Lizano se realizó en una vivienda de alquiler en el sector de Suerre de Jiménez de Pococí, mientras las otras diligencias se llevaron a cabo tras 11 allanamientos que se realizaron a las 6 a. m. de ayer en Santa Bárbara de Heredia, San Antonio de Desamparados y Limón.
Los presuntos gatilleros apellidados Alfaro, de 24 años; Víquez, de 19 y Platero, de 20 años fueron capturados la noche de este martes sobre la Ruta 32 cuando ingresaban a Siquirres en un vehículo. En este el OIJ encontró un guante de tela color negro, se presume que utilizaron el día del atentado.
Lizano es miembro del Tribunal Penal de Pococí y al parecer habría pagado ¢7 millones al grupo de sicarios para que acabaran con la vida de Paisano quien (el 14 de diciembre del 2012) conducía su auto, marca Mitsubishi, frente a la estación de Servicio Total en la salida a la carretera Braulio Carrillo.
Ese día, a las 7:10 a. m., Paisano decide cambiar la estación de la radio en su auto, se inclina y, en ese preciso momento, 400 metros antes de llegar a los Tribunales, es alcanzado por otro automóvil, donde una persona sacó un arma y disparó en varias ocasiones.
BALAS SE ALOJAN EN ASIENTO
Según el informe del OIJ, dos de las balas ingresaron por una ventana de atrás, impactaron la cabecera del asiento del conductor y salieron por el techo del carro. Milagrosamente el funcionario judicial resultó ileso.
Paisano es coordinador del Tribunal Penal de Pococí, con más de 15 años de experiencia; habría dicho a la policía que escuchó 2 tiros, pero no les dio importancia y continuó hasta que un chofer lo alertó de los impactos de bala en la ventana.
Tras el atentado, el funcionario cambió de casa y lugar de trabajo. Tuvo que sacar vacaciones y luego ser reubicado bajo el programa de Protección de Víctimas y Testigos, dedicándose a resolver casos no tan importantes y sin estar en debates.
El sospechoso cuenta con 26 años de carrera judicial y estaba a solo 4 años de jubilarse luego de haber sido fiscal.
También había solicitado la prórroga del nombramiento, sin embargo, por motivos que no fueron revelados a la prensa, se la negaron.
Tras los allanamientos, el OIJ encontró 19 armas de fuego tales como: una escopeta y dos pistolas, sus respectivas municiones, documentación y computadoras que fueron decomisadas.
EMPIEZA A GESTARSE LA TRAMA
Un día antes del atentado (13 de diciembre), dos agentes del OIJ observaron el auto que llevaban los pistoleros por lo que anotaron el número de placa, ya para el 24 de ese mismo mes logran ubicarlo en una venta de carros en Grecia.
Tras una minuciosa revisión la policía encuentra residuos de pólvora y marcas en la tapicería de los asientos, estas pruebas fueron llevadas a un análisis más exhaustivo.
Un hombre de apellido Guido, de 26 años, quien tiene una compra y venta en Limón y no posee antecedentes, fue el que interactuó con el juez sospechoso. Se presume que estuvieron conversando con otro sujeto apellidado Miller (de 32), el joven cuenta con antecedentes por el delito de legitimación de capitales.
Al parecer ese sujeto hizo los contactos con los pistoleros Alfaro, Víquez y Platero; todos, según el OIJ, novatos en la acción de sicariato.
José Pablo González, fiscal Adjunto, mediante una conferencia de prensa aseguró que llevará a Lizano a la inspección judicial para que profundicen con el caso que cuenta con dos testigos de la corona por el delito de tentativa de homicidio agravado.
JUEZ 1 MES SUSPENDIDO
Zarela Villanueva, presidenta en ejercicio de la Corte Suprema de Justicia, suspendió por un mes al juzgador detenido por autoridades judiciales, a quien se le involucra en un hecho delictivo en perjuicio de otro compañero juez. La suspensión fue dictada mediante resolución de las ocho horas del 8 de mayo 2013 y la misma rige a partir de hoy.
La jerarca judicial garantiza a la ciudadanía que los órganos jurídicos realizarán todas las acciones necesarias en cumplimiento del principio de legalidad y manifiesta su respeto a la independencia del Ministerio Público y los Tribunales de Justicia en la investigación.
“Es un hecho, sin duda, que lamentamos por su gravedad. Sin embargo, la institución cuenta con la voluntad para actuar de forma transparente en la investigación y aplicación de ley, en todas sus consecuencias, frente a este tipo de hechos que son aislados”, explicó.
Villanueva agregó que ha girado las instrucciones para que paralelamente se aplique el régimen disciplinario dentro del marco de las competencias que confiere del Poder Judicial.
La fiscalía estaría solicitando al Tribunal Penal un año de prisión preventiva para el juez de apellido Lizano, mientras se termina con la investigación.