A sus 91 años, Quincy Jones, el famoso productor y compositor que incluso colaboró con Michael Jackson, falleció este domingo.
Quincy Jones, quien fue reconocido mundialmente como productor y compositor, murió a sus 91 años.
El artista colaboró en vida con grandes figuras de la industria musical como Michael Jackson, Ray Charles y Frank Sinatra.
Según versiones de su publicista, Jones falleció rodeado de sus hijos, hermanos y más familiares.
“Es una pérdida increíble para nuestra familia. Celebramos la gran vida que vivió y sabemos que nunca habrá otro como él. Es verdaderamente único y lo extrañaremos profundamente. Nos reconforta y nos enorgullece enormemente saber que el amor y la alegría”, indicó la familia de Jones mediante un comunicado de prensa.
Dentro del mismo, la familia expresó cuánto significa para ellos el arte que deja como legado. “La esencia de su ser fue compartida con el mundo a través de todo lo que creó. A través de su música y su amor ilimitado, el corazón de Quincy Jones latirá por la eternidad”, añadieron.
Abriendo puertas
Jones comenzó tocando en pequeños locales. Escribió su primera composición y desarrolló habilidades para los arreglos musicales y la trompeta.
Conoció a Ray Charles -futuro pionero del blues y el bebop- tras una actuación, y el dúo se volvió un pilar de la música local.
Jones estudió brevemente en el Berklee College of Music en Massachusetts, antes de unirse a las giras de Lionel Hampton y mudarse a Nueva York, donde se dio a conocer como arreglista de famosos que incluyeron a Duke Ellington, Dinah Washington, Count Basie y, claro, Charles.
En la década de 1950 se fue de gira a Europa.
Fue la segunda trompeta de Elvis Presley en “Heartbreak Hotel” y formó un dúo con Gillespie durante varios años antes de mudarse a París en 1957, donde estudió con la legendaria compositora Nadia Boulanger.
Recorrió Europa con varias orquestas de jazz, pero se dio cuenta de que la fama y el talento no se monetizaban automáticamente.
Endeudado, Jones se pasó al lado empresarial del negocio de la música, consiguió un trabajo en Mercury Records, donde alcanzó el puesto de vicepresidente.
“Cuando se trataba de realmente controlar una disquera y la música, no eran personas negras las que lo controlaban”, dijo Hancock. “Teníamos las manos atadas”.
“Quincy (…) abrió la puerta”, sostuvo.
“Thriller”
Jones trabajó también en Hollywood, en shows de televisión y películas.
Escribió sus propios éxitos, como “Soul Bossa Nova”, mientras realizaba arreglos a un ritmo vertiginoso para decenas de estrellas de la industria musical.
Trabajó con Sinatra, arreglando la más famosa versión de “Fly Me To The Moon”, y forjó una relación personal y musical con el cantante hasta su muerte.
Jones fundó un sello discográfico, una revista de hip-hop y produjo el famoso programa de televisión “El Príncipe de Bel-Air”, que hizo saltar a la fama a Will Smith.
Llevó a Oprah Winfrey a la pantalla grande al presentársela a Steven Spielberg, quien la reclutó para actuar en la película “El Color Púrpura”, por la que fue nominada al Óscar.
Apoyó a Martin Luther King Jr y a causas humanitarias en África. Reunió a decenas de estrellas del pop para cantar el clásico “We Are the World”, para recolectar fondos contra la hambruna en Etiopía en 1985.
– Soñar en grande –
La intensa vida personal de Jones no se quedó rezagada en comparación con su carrera. Se casó tres veces y tuvo siete hijos.
Sufrió varios problemas de salud, incluyendo un casi mortal aneurisma cerebral en 1974, tras el cual dejó de tocar la trompeta.
Jones dijo haber sufrido una “crisis nerviosa” en 1986 por exceso de trabajo, y en 2015 estuvo en coma diabético y tuvo un coágulo masivo de sangre que lo llevó a dejar el alcohol.
Entre las figuras más condecoradas del mundo del espectáculo, obtuvo prácticamente todos los premios más importantes de la industria, incluyendo 28 Grammys.
También obtuvo un Emmy, un Tony, y un Óscar honorario.
(D.R – AFP)