Mientras el presidente Carlos Alvarado sigue publicando por las noches en sus redes sociales sobre la llegada de más vacunas contra el Covid-19, un escenario muy diferente es el que viven los hospitales en el país.
La gota que derramó el vaso ocurrió este miércoles en el Hospital San Rafael de Alajuela, donde no les quedó de otra que poner un papel en que se leía: “Estimados funcionarios, por problemas de desabastecimiento de vacunas esta semana las personas agendadas los días miércoles 20, jueves 21, viernes 22 serán reprogramadas a partir del 15 de febrero del 2021. Agradecemos su compresión”.
Consultado por DIARIO EXTRA, José Alberto Murillo, dirigente del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Privada y Pública (Sitepp), explicó que la situación causa gran preocupación entre el personal médico, ya que hay cientos de funcionarios que a la fecha no han recibido ni siquiera la primera dosis de la vacuna de Pfizer contra el nuevo coronavirus.
Lo anterior resulta inadmisible si se toma en cuenta que ya la Caja vacunó a personal médico de centros de salud privado.
“Imagínese que yo trabajo en nutrición, nosotros estamos en contacto con pacientes y ahí no han vacunado a nadie, ni qué decir de compañeros médicos y enfermeros que faltan por vacunar, o los compañeros de servicios generales que también se han visto muy expuestos con la pandemia”, expuso Murillo.
¿QUÉ DICE EL HOSPITAL?
Este medio supo que la situación se debe a una baja “disminución en la entrega de dosis programadas para el lunes 18 de enero”.
Al menos eso señala el oficio HSRA-DG-0228-21 emitido el martes pasado y firmado por Mary Denisse Munive, directora a.c. del Hospital San Rafael.
El documento dirigido a las jefaturas médicas y administrativas añade: “Ante dicha disminución en la cantidad de vacunas recibidas para la presente semana, el comité local de vacunación, y con aval de esta Dirección Médica, se tomaron las previsiones del caso considerando la priorización estipulada del personal de mayor contacto, así como algunos otros del segundo grupo para la colocación de la vacuna durante la semana”.
El oficio continúa: “Desde la Dripss Central Norte, se ratifica la colocación de la segunda dosis al primer grupo de funcionarios que recibieron su primera dosis entre el 4 de enero y hasta el próximo 22 de enero”.
Es decir, ante el desabastecimiento, al hospital solo le alcanza para colocar la segunda dosis de la vacuna a quienes ya habían sido inmunizados.
De lo anterior, llaman la atención dos puntos. El primero, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) descartó que la baja en la producción de inyecciones de Pfizer afectara en alguna medida a Costa Rica.
La otra duda es si las personas por vacunar ya estaban en un cronograma, qué sucedió con las dosis que les correspondían, dónde están, por qué no están en dicho centro de salud, por qué decenas de funcionarios deberán esperar hasta mediados de febrero.
CAJA SE JUSTIFICA
De forma general y escueta sobre el tema, la Caja precisó: “La planificación del proceso de vacunación en el centro médico se realiza de forma semanal, de acuerdo con la disponibilidad de las vacunas a nivel institucional, es por eso que semana a semana se pueden hacer ajustes a la lista de los funcionarios que se van a vacunar. Tanto la Dirección General como la comisión local de vacunas revisan los listados proporcionados por las jefaturas con frecuencia para llevar el control del cumplimiento de los criterios de inclusión según la prioridad establecida en el protocolo institucional. La comisión local de vacunas hace un cierre diario para determinar la cantidad de vacunas aplicadas contra lista, así como revisión de la lista del día siguiente”.